Las calles aledañas al Congreso abarrotadas, fotos de la Princesa de Asturias engalanando el ambiente, pantallas gigantes para seguir la ceremonia y mucha expectación ante un día histórico para la Monarquía española. Leonor cumple 18 años este miércoles 31 de octubre y presta juramento a la Constitución con los Reyes y la infanta Sofía como testigo de excepción. Días antes de tan importante momento eran muchas las preguntas que sobrevolaban: ¿estaría nerviosa?, ¿cuál sería su actitud?, ¿qué tipo de look luciría?
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Todas las incógnitas han quedado resultas. Poco antes de las once de la mañana, la Familia Real salía hacia las Cortes en dos Rolls Royce, saludando a los medios de comunicación que la esperaban a las afueras de Zarzuela. El protocolo establece que los Reyes y sus hijas no deben viajar juntos. Sin dejar de sonreír, Leonor, acompañada de su hermana la infanta Sofía, ha sorprendido a todos con el estilismo elegido.
Nada de vestidos de gala, la futura reina de España envía un mensaje claro: quiere ser jefa de Estado y huir del boato de la Institución, mostrarse como una mujer de su tiempo, moderna y empoderada. Por ello, ha lucido un traje de chaqueta blanco, con zapatos en el mismo tono de tacón ancho de Lodi, y una coleta baja y pulida. Un look de aire nupcial, de estilo masculino y de oficina con el que asume este importante acto y su confirmación como heredera.
Segura de sí misma, ya arropada por sus padres y su hermana, la Princesa de Asturias ha lucido en la solapa el Toisón de Oro que Felipe VI le entregó en 2018. La imagen de la futura reina llegando a las Cortes nos recuerda inevitablemente a Letizia, pues ella también eligió un traje blanco para su pedida de mano oficial con el entonces Príncipe de Asturias. El suyo era de Armani y lo ha lucido en otras ocasiones. Ahora, su hija mayor ha seguido su testigo emulando aquel outfit.
Pero el traje de Leonor no sólo tiene un guiño a su madre, también a su padre. Según publica Vanitatis, información que ha confirmado Magas hablando con la firma, el dos piezas ha sido realizado a medida para ella por la centenaria sastrería Serna, que fue también quien realizó el uniforme del Rey el día de su boda. En cuanto a los pendientes, ha estrenado un diseño de una de las firmas preferidas de la Reina, Gold & Roses, concretamente el modelo Sasa Crawler Tanzanita, en oro rosa de 18 quilates, diamantes y tanzanitas.
La ceremonia ha sido breve, pero muy emotiva y cargada de simbolismo. La heredera ha prestado su juramento con voz segura y sin dudar, ante la atenta mirada de los Reyes y Sofía. "Juro desempeñar fielmente mis funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes, respetar los derechos de los ciudadanos y de las Comunidades Autónomas, y fidelidad al Rey", ha dicho.
Seguidamente se le ha impuesto las medallas de las cámaras del Congreso, momento en el que se ha producido una anécdota curiosa. Felipe VI le ha retirado la coleta para poder colocarle mejor el collar. La Princesa ha recibido una sonora ovación que ha durado casi cuatro minutos.
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Seguidamente, la Familia Real ha protagonizado el besamanos en el que Leonor se ha mostrado relajada y muy orgullosa. Éste ha sido el inicio de un día histórico, que aún tiene recorrido: la imposición del collar de la orden de Carlos III, el discurso de la heredera y la recepción posterior en el Palacio Real. Sin olvidar, la fiesta privada en El Pardo, con las infantas Elena y Cristina, el Emérito y los Ortiz Rocasolano.