Este 10 de junio, la princesa Magdalena de Suecia cumple 42 años y la Casa Real ha publicado un nuevo retrato oficial que viene con buenas nuevas y pinceladas de moda. Es la menor del clan y sus apariciones oficiales han sido escasas, sobre todo porque ha estado mucho tiempo viviendo en Miami.

Sin embargo, ha llegado la hora de dar un nuevo rumbo a su vida y regresar a su país natal, algo que, lógicamente, aumentará los actos de su hasta ahora casi inexistente agenda real.

"Su Alteza Real cumple hoy 42 años. La princesa y su familia ahora se mudan a Suecia. Después de varios años viviendo en el extranjero, la princesa y el señor Christopher O'Neill han decidido que la familia viva por el momento en Estocolmo", así reza el comunicado que han emitido.

Junto a él, una foto inédita en la que la hermana de Victoria aparece sonriente junto a su marido y sus tres hijos. La imagen es curiosa, ya que todos van vestidos a juego y hay un gesto muy cariñoso de la Princesa con la pequeña del clan, Adrienne, a quien coge delicadamente de la mano.

Magdalena ha escogido un look repetido para este posado, pero no por ello menos elegante y acertado. Se trata de un vestido con efecto dos piezas de la firma británica Self Portrait con la parte de arriba adornada con bordados, bajo tipo péplum y cinturón y falda plisada de largo midi. Lo llevó el 2023 durante las celebraciones del 50 aniversario de la subida al trono de su padre, el rey Carlos Gustavo. Lo ha combinado con unos salones plateados.

En cuanto a Leonore y Adrienne, de diez y seis años respectivamente, lucen dos vestidos iguales en el mismo tono que el de su madre y probablemente de la misma firma, pues su patrón responde perfectamente a la colección Kids de la marca. Con la parte superior con pequeñas jaretas y bordados, mangas abullonadas y transparentes y falda plisada con dos volantes, ambas con bailarinas blancas.

No solo eso, el príncipe Nicolás, de ocho años, también añadía un guiño a su madre y sus hermanas en el look, con una corbata azul cielo. Christopher O'Neill, en cambio, optó por traje oscuro con camisa blanca. 

La noticia del regreso definitivo de la Princesa a Estocolmo supone una gran alegría para ella, que no parecía muy contenta con su vida en Estados Unidos. Ha estado 12 años fuera de Suecia y, aunque su vuelta a casa llevaba tiempo sobre la mesa, ha sido ahora cuando llega la confirmación definitiva. Antes han tenido que poner a la venta su mansión de Florida y se sabe que vivirán en una residencia perteneciente a la Casa Real en la capital sueca.