La osteoporosis es una enfermedad sistémica del esqueleto que se caracteriza por una baja masa ósea acompañada de un deterioro en la arquitectura del hueso, dando lugar a un aumento de la fragilidad ósea.
[Las claves del experto sobre la osteoporosis, la enfermedad que afecta al 22,6% de las mujeres]
Su prevalencia es mayor en mujeres, sobre todo tras la menopausia, debido al cese brusco de los estrógenos, según Manuel Romero, jefe de Servicio de Reumatología del Hospital Quirónsalud Córdoba.
Fracturas por osteoporosis
Alrededor de doscientos millones de personas en todo el mundo padecen osteoporosis y se estima que causa 1,6 millones de fracturas de cadera, 1,7 millones de fracturas de antebrazos y 1,4 millones de fracturas vertebrales.
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el 40 % de las mujeres de más de 50 años puede sufrir una de estas fracturas en su vida.
Estas pueden ser:
- Fracturas vertebrales. Son las fracturas osteoporóticas más frecuentes, y también las más difíciles de detectar, ya que 2 de cada 3 son asintomáticas. Sus consecuencias son: dolor de espalda, pérdida de altura, disminución de la calidad de vida, aumento del riesgo de nuevas fracturas y aumento de mortalidad.
- Fracturas de cadera. Aumentan con la edad, produciéndose unos 15 años después de las fracturas de muñeca y vertebrales. Son las más devastadoras en cuanto a complicaciones y mortalidad. El mayor riesgo de muerte se produce en los 6 meses posteriores a la fractura (20%), reduciéndose posteriormente con el tiempo. Del 80% restante, aproximadamente el 50% sufrirá pérdida de la capacidad funcional.
- Fracturas de Colles. Según las series son las de más temprana aparición. Pueden impactar negativamente sobre de calidad de vida.
Diagnosticar osteoporosis
Para saber cuándo se puede diagnosticar osteoporosis conviene conocer la cronología de la pérdida de masa ósea, según el jefe de Servicio de Reumatología del Hospital Quirónsalud Córdoba.
Cuando se alcanza el pico al principio de la edad adulta comienza a perderse lentamente masa ósea, en meseta, hasta llegar a la menopausia. En esta etapa, coincidiendo con la caída del nivel de estrógenos, se acelera esta pérdida ósea.
Para diagnosticar la osteoporosis se buscan factores de riesgo en la historia clínica médica y se mide la densidad de masa ósea mediante densitometría ósea de columna lumbar y cadera.
Entre los factores de riesgo podemos encontrar: la edad, el consumo de tabaco, la delgadez (IMC <19), antecedentes familiares de fracturas, menopausia precoz, dieta pobre en calcio y vitamina D y toma de algunos tratamientos como corticoides o fármacos utilizados para el cáncer de mama.
La prevención
Para prevenir la pérdida de masa ósea o ralentizarla, el Dr. Romero recomienda mantener unos hábitos de vida saludables que implican seguir una alimentación sana, practicar ejercicio regular y no consumir tóxicos como el tabaco o hacerlo en pocas cantidades como el alcohol.
Además, recomiendan tomar 1.200 mg de calcio diarios y 800 unidades internacionales de vitamina D que se pueden encontrar en alimentos como el queso, yogur, verduras verdes, brócoli o quinoa.
La vitamina D se absorbe gracia a la luz del sol, pero como el ritmo de vida actual hace que pasemos gran parte del día en el interior y utilicemos cremas de alta protección solar, es frecuente que se tengan niveles por debajo de los recomendados.
Por último, cuando estas medidas no son suficientes, es necesario instaurar un tratamiento farmacológico.