Bernardo Provenzano, considerado uno de los jefes del entramado mafioso siciliano denominado 'Cosa Nostra', ha fallecido a los 83 años de edad este miércoles en el hospital de San Paolo en Milán, Italia.
Provenzano fue arrestado por la policía italiana el 11 de abril de 2006 en el municipio siciliano de Corleone y, tras ser condenado a cadena perpetua, estuvo preso en la penitenciaria de Parma. Antes de su detención, permaneció prófugo durante 43 años mientras organizaba la actividad de la mafia 'Cosa Nostra' y ordenaba centenares de asesinatos.
Considerado como uno de los mayores criminales de la historia de Italia -y conocido en los ambientes mafiosos como 'Zio Binu' (Tío Bernardo) o como 'U tratturi' (el Tractor)-, Provenzano se encontraba ingresado en el hospital desde el 9 de abril de 2014 debido a un coma profundo.
Tanto él como su antecesor en el cargo, Salvatore 'Toto' Rinna, desencadenaron en la década de los ochenta la conocida 'guerra de la mafia' contra el Estado italiano y contra los clanes rivales. Fue aquella una época convulsa que culminó con el asesinato de los jueces antimafia Giovanni Falcone y Paolo Borsellino en 1992.
La villa de Corleone, nido de los más sanguinarios capos de la mafia, afronta un presente donde su población prefiere no mencionar nada que esté relacionado con la 'Cosa Nostra' pese a que gran parte del turismo extranjero viene con el interés de rememorar algunos de los fotogramas que Francis Ford Coppola inmortalizó en su saga El Padrino.
Provenzano era otro nombre más de una larga lista de asesinos que llevan sometiendo en la sombra y en el silencio a esta pequeña localidad de 12.000 habitantes desde mediados del siglo pasado. La muerte de este personaje no despeja la imagen de un lugar lúgubre donde se produjeron "un total de 153 asesinatos" entre 1944 y 1948 siendo uno de los emplazamientos "con mayor índice de asesinatos del mundo", según escribió el viajero británico Norman Lewis en su obra La Honorable Sociedad (Alba Clásica) en su visita a la isla italiana.