El Comité Nacional Demócrata (DNC por sus siglas en inglés) ha pedido disculpas este lunes al senador Bernie Sanders después de que se hayan filtrado correos electrónicos en los que se sugería que los dirigentes del partido habrían intentado sabotear la campaña presidencial de Sanders en favor de su rival en las primarias, Hillary Clinton.
"En nombre de todo el DNC, queremos ofrecer una profunda y sincera disculpa al senador Sanders, sus seguidores, y a todo el partido demócrata por las inexcusables apreciaciones hechas en los correos electrónicos" reza el comunicado que ha hecho público el DNC durante la inauguración de la convención demócrata en Filadelfia.
Señala además que los correos no reflejan "el firme compromiso con la neutralidad durante el proceso de nominación".
Asimismo, los líderes del DNC afirmaron que se están tomando las "medidas adecuadas para garantizar" que lo ocurrido con Sanders "no vuelva a suceder".
Comienzo de la convención
Los demócratas iniciaron este lunes en Filadelfia su Convención Nacional para elegir a Hillary Clinton como su candidata a la Casa Blanca en medio de la polémica por esos correos del DNC filtrados por WikiLeaks.
El escándalo ha empañado también las horas previas a la apertura de la Convención Demócrata y ha vuelto a poner en evidencia las divisiones internas del partido que ya se vieron durante el largo y duro proceso de primarias entre Clinton y Sanders.
WikiLeaks aseguró el viernes tener en su poder 19.252 correos electrónicos del DNC, en varios de los cuales altos funcionarios del partido hablan de estrategias para vencer a Sanders y debilitar su candidatura presidencial en favor de Clinton.
Sanders exigió este domingo la renuncia de Wasserman Schultz, quien horas después anunció que dejará el cargo cuando concluya la convención.
Este lunes, durante un desayuno con delegados de su estado (Florida), la congresista fue abucheada por algunos de los presentes y poco después anunció su decisión de renunciar también a la tarea de inaugurar la convención, un rol que normalmente asume el líder de turno del DNC.
Los primeros compases de la convención, que se celebra en el pabellón deportivo Wells Fargo, estuvieron marcados por gritos y cánticos de los seguidores de Sanders casi cada vez que se pronunciaba el nombre de Clinton.
En un mensaje enviado a sus seguidores, Sanders les ha pedido que se abstengan de protestar o interrumpir a los oradores de la convención y en una intervención anterior urgió a sus delegados en Filadelfia a que apoyen a la ex secretaria de Estado.
Michelle Obama conmueve
Michelle Obama, en un emotivo discurso, dijo que en noviembre está en juego decidir "quién tendrá el poder para dar forma" a las vidas de todos los niños estadounidenses.
Al declarar su apoyo a Clinton, Michelle Obama destacó, con la voz quebrada por la emoción, que gracias a ella sus dos hijas "dan por hecho" que una mujer puede ser la próxima presidenta de EEUU.
"No permitan que nadie les diga que este país no es grande (...) Este país ya es el más grande del mundo", enfatizó, entre aplausos, al referirse al lema de campaña de Trump, que promete "hacer a Estados Unidos grande de nuevo".
Sobre Clinton, que saldrá de esta convención como la primera mujer que aspira a la Presidencia por uno de los dos grandes partidos del país, Michelle Obama destacó que no se amedrenta ante la presión y "no se detiene ante nada".
Otro de los discursos más esperados de la noche era el de la senadora Elizabeth Warren, símbolo del ala más progresista de los demócratas, aunque finalmente su intervención no fue tan aclamada como las de Sanders y la primera dama.
Warren advirtió a Trump de que "este noviembre los estadounidenses irán tras él" para dejarle claro que un "hombre así no puede ser nunca presidente de Estados Unidos", al acusar al magnate de dedicarse a "encender los ánimos" para ampliar las divisiones, el odio y el miedo en el país.