El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se he quejado de que los manifestantes opositores prendieran fuego a un hombre durante una protesta este domingo, supuestamente por haberse declarado afín al gobierno.

Maduro acusa a EEUU de usar a artistas y deportistas venezolanos en su contra

"Prendieron fuego una persona, le golpearon, apuñalaron... Casi lo linchan sólo por gritar que era 'chavista'", ha explicado Maduro. Sin embargo, los testigos del incidente, según recoge Reuters, señalaron que las personas que se congregaban en la marcha acusaron al hombre atacado de ser un ladrón.

Al menos unas 100 personas, que participaban en una protesta contra el Gobierno de Maduro, lo rodearon, rociaron de gasolina y le prendieron fuego. El hombre, convertido en una bola de fuego, salió huyendo mientras el resto de la gente se apartaba. En su huida, parte del fuego se trasladó a una moto. Mientras una parte de los manifestantes querían dejarlo morir, otros lo salvaron, ayudando a que se extinguiera el fuego.

El herido, con graves quemaduras, rodeado de manifestantes Reuteres

El vídeo de la agresión apareció en la televisión estatal. Maduro identificó a la víctima como un joven de 21 años llamado Orlando Figuera. El presidente declaró que estaba siendo tratado en el hospital de varias heridas provocadas por el fuego graves.

"Quemar a una persona por pensar que es chavista es un crimen de odio contra la humanidad", ha afirmado el sustituto de Chavez al frente del país en su programa de televisión semanal. Hace uno días comparó la situación de los pro gubernamentales con la de los judíos en la Alemania nazi.

"Los opositores están buscando un golpe de estado con la ayuda de Estados Unidos. Han intensificado la persecución de chavistas en sus casas y en la calle. Venezula encara un movimiento antigobierno intolerante y que contiene mucho odio, muy similar al fascismo nazi".

Las protestas mantienen en vilo el país. La oposición acusa a Maduro de ser un dictador que ha quebrado la economía de un país miembro de la OPEC.  Exigen la convocotaria de elecciones, ahora que, después de muchos años bajo la sombra socialista, mantienen un apoyo mayoritario de la ciudadanía.

"YA NO HAY MARCHA ATRÁS"

La mayoría de marchas opositoras cuajan en batallas campales cuando se encuentran con las fuerzas de seguridad, que bloquea el paso a los manifestantes provocando fuertes enfrentamientos. En seis semanas de protestas han muerto un total de 47 personas en las calles de toda Venezuela.

Durante la ristra de protestas del fin de semana han resultado heridas otras 46 personas. La Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana reprimieron la marcha haciendo uso de gases lacrimógenos en el este de la capital, donde una persona ha sido detenida, según recoge Europapress del diario local El Universal.

El mayor enfrentamiento del fin de semana de protestas ha ocurrido a primera hora de la mañana del domingo, cuando una de las principales autopistas ha sido cortada. Los manifestantes se disponían a marchar contra algunos de los edificios del Gobierno, chocando con la Policía.

El diputado Juan Guaidó ha denunciado en Twitter que un grupo de agentes de la PNB detuvieron a un manifestante "si ni siquiera mediar".

Henrique Capriles, el gobernador del estado de Miranda, ha destacado que la lucha continuará: "ya no hay marcha atrás". "Tenemos que seguir defendiendo la Constitución y exigiendo democracia", ha dicho. Un parlamentario, precisamente por el mismo estado, recibió un golpe de la PNB. "Me identifiqué como diputado pero me agredieron con cascos y escudos", ha manifestado. "La PNB no puede detener a un menor de edad que sólo se manifestaba de forma pacífica".

El clima de tensión ha alcanzado, incluso, a otros países. En Australia, el hijo de uno de los miembros del gobierno, paseaba por la playa cuando un grupo de personas comenzó a increparlo, acusando a su padre de la situación que se viven en Venezuela. También un ministro vivió esta situación, siendo obligado a abandonar un local en Florida por la misma razón.

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