Para Macron, el presidente francés, el plan del Brexit de la primera ministra británica, Theresa May, "es inaceptable". "Ha sido un buen y valiente paso por parte de la primera ministra", ha declarado el mandatario galo ante los medios de comunicación. "Pero, a día de hoy, todos nosotros [los Veintiocho] estamos de acuerdo en que las propuestas, tal y como aparecían expuestas, no eran aceptables, sobre todo, la parte económica", ha explicado.
Macron, que ha tomado parte en el divorcio entre Gran Bretaña y la UE, ha advertido de que el Brexit muestra a los demás países cuáles son la consecuencias negativas de abandonar el bloque europeo. "Aquellos que dicen que podemos vivir fácilmente sin Europa, que todo va a estar bien y que va a traer un montón de dinero a casa son unos mentirosos".
Ha hecho hincapié en los "principios muy claros" de la Unión Europea (UE) para preservar "la integridad" de su mercado único, algo apoyado por el maltés Muscat que describió como "una gran línea roja". De hecho, ha rechazado de plano la idea de May de crear una zona de libre comercio para bienes a ambos lados del Canal de la Mancha porque, según el líder galo, se dañaría la "coherencia" de las cuatro libertades que defiende el mercado único sobre la libre circulación e indivisible de bienes, servicios, capitales y personas.
Además, el presidente francés ha agregado que la polémica propuesta de May, conocida como plan Chequers, "no es algo que se pueda tomar o dejar".
Los 27 países confirma su "plena unidad"
La UE se ha fijado octubre como plazo límite para cerrar un acuerdo sobre el Brexit y cumplir con el calendario previsto, un objetivo que los Veintiocho formalizarían en una cumbre en noviembre, ha anunciado, por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk. "El momento de la verdad para las negociaciones del Brexit será el Consejo Europeo de octubre. [En ese mes] esperamos el máximo avance y resultado en las negociaciones", ha expuesto Tusk en una rueda de prensa tras la cumbre de Salzburgo. "Si sentimos que vamos a ser capaces de finalizar y formalizar nuestro acuerdo en noviembre, convocaré esta reunión extraordinaria", que tendría lugar el 17 y 18 de ese mes, ha añadido Tusk.
En cualquier caso, ha subrayado que esa posible cumbre no se organizaría "como emergencia", sino "como remate de unas negociaciones efectivas" antes de octubre y durante la reunión del Consejo Europeo de ese mismo mes. "Significa que nuestros socios que están aquí tienen absolutamente claro que lo que necesitamos hoy es determinación común en ambas partes para terminar nuestras negociaciones en octubre, pero para algunas cuestiones legales y formales necesitaremos una cumbre para formalizar este acuerdo", ha explicado Tusk. A continuación, ha insistido en que "sin un gran final en el sentido positivo de esa palabra" en octubre "no hay razón para organizar una reunión especial en noviembre".
El político polaco ha asegurado que los veintisiete países que permanecerán en la UE tras el Brexit han vuelto a confirmar su "plena unidad". Ha agregado que no habrá pacto de retirada sin una solución "sólida, operativa y legalmente vinculante" para Irlanda y que se ha llegado a un acuerdo para formular una declaración política conjunta que facilite "la máxima claridad posible en las relaciones futuras". Además, ha indicado que todos los socios han coincidido en que, aunque hay elementos "positivos" en la propuesta de May para la futura relación (Chequers), "el marco propuesto para la cooperación económica no funcionaría porque amenaza con socavar el mercado común".
El primer ministro de Holanda, Mark Rutte, también se ha pronunciado sobre la posibilidad de organizar una cumbre extraordinaria en noviembre sobre el Brexit. "Tenemos que tomar en consideración la opción de que haya tanto sobre la mesa que no podamos finalizar todo en octubre", ha comentado sobre la idea de una reunión adicional.