Los primeros camiones que llevan ayuda humanitaria a Venezuela han llegado a la ciudad colombiana de Cúcuta, en la frontera entre los dos países. Es la primera ayuda que llegaría a Venezuela después de que Maduro mandara al ejército a bloquear el miércoles la frontera con Colombia para impedir estas ayudas.
El convoy, conformado por dos grandes camiones y otros siete más pequeños, llegaron al puente de Tienditas el jueves, un día después del bloqueo, que se realizó con contenedores y un tanque de combustible.
Tocando las bocinas al pasar por delante de un grupo de reporteros, los camiones se detuvieron frente a un almacén donde se guardará la comida y las medicinas proporcionadas hasta que pueda ser entregada.
Un puñado de manifestantes se reunieron para dar la bienvenida a los camiones, moviendo pancartas y gritando "¡Maduro fuera!". Uno de ellos llevaba un cartel que rezaba: "La mejor ayuda humanitaria es quitarnos el cáncer llamado Nicolás Maduro".
El Gobierno de Maduro asegura que es una conspiración
El senador estadounidense Marco Rubio, quien ha jugado un papel importante en la política de Donald Trump en Venezuela, tuiteó el jueves: "Alrededor de 50 toneladas de ayuda de EEUU está ahora en Colombia. El futuro post-Maduro de los líderes militares en Venezuela depende en gran parte de si dejan o no que la ayuda llegue a la gente".
Maduro niega la existencia de una crisis humanitaria en Venezuela, y lo miembros de su administración han denunciado el esfuerzo humanitario como una conspiración diseñada para desestabilizar su Gobierno.
Las Naciones Unidas estiman que alrededor de 3 millones de personas han huido del país desde 2015, para huir de la falta crónica de comida y medicinas, desmoronando el sistema sanitario y de transporte, dejando la economía venezolana en caída libre.
Miguel Pizarro, un opositor de Maduro que está coordinando la operación de llegada de la ayuda, ha dicho al diario The Guardian que el bloqueo del puente por el ejército demuestra cómo de desesperadamente Venezuela necesita una "transición ordenada".
"Estamos hablando de salvar vidas, de traer soluciones para mucha gente que necesita ayuda, quienes no tienen a nadie que les mande cosas desde fuera, y que no tienen dinero para buscar otras alternativas", dice.
Estados Unidos ha prometido un gasto de 20 millones de dólares en ayudas para Venezuela, a pesar de que los analistas aseguran que esa medida hará poco por aliviar la escasez de comida.
"Veinte millones de dólares apenas roza la superficie de las necesidades de Venezuela", dice Adam Isacson, un experto en seguridad en la oficina de Latino Amércia en Washington D.C.
"Es inteligente intentar debilitar la lealtad militar venezolana hacia Maduro a través de obligarles a acatar una orden repulsiva: bloquear comida y medicinas. Tanto si lo dejan pasar como si no, Maduro pierde".
"Un punto de inflexión en nuestra historia"
En los últimos años, Cúcuta se ha sumido bajo la creciente presión de la crisis venezolana: cientos de miles de personas han pasado por la ciudad, presionando los recursos del gobierno local".
Los miembros de la oposición venezolana que se han concentrado en el Casino Internacional Hotel de la ciudad tienen que dar con cómo pasar la ayuda por la frontera. "Es la pregunta del millón de dólares", dice uno. "Afortunadamente lo resolveremos pronto porque es un punto de inflexión en la historia de nuestro país".
Un funcionario colombiano que está al tanto de esas reuniones, que también se están llevando a cabo entre Washington, Bogotá y el equipo en Caracas de Guaidó, dijo que todas las opciones están sobre la mesa.
"Incluso pueden ser llevadas por el aire", dice, añadiendo que "no supondría una brecha en la soberanía venezolana porque Maduro es un tirano y no el líder legítimo. Juan Guaidó es el líder del país".
El pasado jueves el ministro de exteriores Alan Duncan dijo que el Reino Unido también estaba preparando distribución humanitaria. Añadió también que el Gobierno británico estaba buscando congelar los fondos para pagar los sueldos de los militares venezolanos, en un intento de minar a Maduro.