El líder norcoreano, Kim Jong-un, llegará a Vietnam el próximo 25 de febrero para una visita de Estado de dos días, antes de la cumbre que mantendrá con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, los días 27 y 28, informaron a Efe fuentes gubernamentales vietnamitas.
En la primera visita de un líder norcoreano a Vietnam desde la reunificación del país en 1975, Kim se reunirá con el presidente de Vietnam y secretario general del Partido Comunista, Nguyen Phu Trong, en el palacio presidencial de Hanoi el día 25.
Todas las reuniones previstas con responsables vietnamitas tendrán lugar en la primera jornada, mientras que dedicará la segunda a "actividades en el exterior" que podrían incluir una visita a la fábrica de la empresa tecnológica surcoreana Samsung, según fuentes del Gobierno.
Los contactos entre Vietnam y Corea del Norte se han multiplicado en los últimos meses, lo que se interpreta como un posible interés de Piongyang en explorar el modelo de apertura económica emprendido por Vietnam en las últimas tres décadas.
Tras la visita, Kim y Trump celebrarán el 27 y 28 de febrero en la capital vietnamita su segunda cumbre, después de haberse reunido por primera en Singapur en junio de 2018.
Se espera que esta nueva reunión sirva para avanzar en el diálogo sobre el abandono del arsenal nuclear por parte del régimen norcoreano, que apenas ha progresado desde la primera cita entre Trump y Kim.
"Nuestro país encara un momento histórico"
El principal diario de Corea del Norte, el Rodong Sinmun, aseguró hoy en un editorial que el país encara "un momento decisivo" en cuanto a desarrollo económico, en aparente referencia a la cumbre que la próxima semana mantendrá con Estados Unidos.
El principal altavoz de la propaganda norcoreana publicó hoy un artículo destacando los avances logrados recientemente en una pequeña isla de su costa occidental llamada Edo en el sector pesquero o de construcción de navíos y consideró que debe servir de ejemplo al resto de la nación.
"Nuestro país encara un momento decisivo histórico. Es el momento de que nos atemos bien los cordones y corramos a toda velocidad, apuntando al más alto objetivo mientras afrontamos este momento crucial", clama el editorial.
En la cita se podrían lograr importantes avances en el proceso de desnuclearización de Pionyang, que a su vez podría obtener a cambio concesiones por parte de Washington, como el alivio de sanciones impuestas por EEUU y la ONU como castigo por sus pruebas de armas.
La relajación de las sanciones impuestas por la comunidad internacional, muy endurecidos tras la escalada armamentística norcoreana de 2017, es un factor clave para poner en marcha los planes de crecimiento económico por los que ha abogado con especial énfasis Kim Jong-un desde principios del año pasado.