Japón ha hecho un llamamiento para que los líderes mundiales no caigan en "tentaciones hacia el proteccionismo" en el mensaje inicial en la cumbre del G20, abierta en la ciudad japonesa de Osaka.
"Una economía libre y abierta es la fundación de la paz y la prosperidad", afirmó el primer ministro japonés, Shinzo Abe, en la primera sesión de los debates del G20, al compartir un almuerzo de trabajo con el resto de los líderes presentes en la cumbre.
"Ahora es el momento de comunicar un fuerte mensaje para el mantenimiento y el fortalecimiento de un sistema libre, justo y no discriminatorio" en temas comerciales, agregó el gobernante japonés.
Las palabras de Abe fueron las únicas que pudieron seguir los periodistas antes de que abandonaran la sala en la que había una enorme mesa redonda a la que se estaban sentados los líderes mundiales y representantes de organizaciones internacionales.
El mensaje del primer ministro se produce en medio de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que se arrastra desde el año pasado y que ha tenido efectos económicos globales y repercusiones periódicas en los mercados bursátiles.
Según Abe, existe una "gran preocupación" sobre la "actual situación en el comercio global".
"El mundo está mirando la dirección a la que se está dirigiendo el G20", agregó el gobernante nipón, que estaba sentado entre el presidente argentino, Mauricio Macri, anfitrión de la anterior cumbre del G20, y el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salman, en cuyo país se celebrará la del 2020.
El jefe del Gobierno japonés dijo que las "tentaciones al proteccionismo" pueden generar "confrontaciones" entre los estados, por lo que hizo votos por defender el libre comercio y principios "consistentes" con la Organización Mundial del Comercio (OMC).
De parte de Latinoamérica, el único gobernante ausente era el mexicano Andrés Manuel López Obrador, que fue reemplazado por el canciller azteca, Marcelo Ebrard.