La recta final de la evacuación en Kabul se ha vuelto más tensa desde el atentado del pasado jueves en el aeropuerto perpetrado por el Estado Islámico (ISIS-K). En el último fin de semana antes de la retirada oficial, fijada para el 31 de agosto, Estados Unidos ha realizado dos ataques contra miembros del grupo terrorista, el primero fue este sábado, cuando terminó con la vida de dos terroristas en represalia por el atentado; el segundo, este domingo, en el que ha eliminado a un atacante suicida que se encontraba en un coche bomba en las inmediaciones del aeródromo.
La ciudad de Kabul tembló este domingo otra vez con dos explosiones: la provocada por el ataque de un dron estadounidense contra un vehículo en el que viajaban supuestos miembros del Estado Islámico, y la del impacto de un cohete contra una vivienda, que causó la muerte de al menos seis civiles. Los talibanes aseguran que se trata de dos incidentes separados aunque se desconoce si existe relación entre ambos.
Los dos ocurrieron cerca del aeropuerto de Kabul y se producen en un momento de máxima tensión después de que el Gobierno estadounidense haya alertado de "amenazas creíbles" contra el aeródromo, donde se concentran las tropas estadounidenses y donde el jueves hubo un atentado con al menos 170 fallecidos.
En un comunicado, el portavoz del Comando Central de EEUU (CENTCOM), el capitán Bill Urban, confirmó que un dron estadounidense había impactado contra un vehículo en el que se desplazaban hacia el aeropuerto supuestos yihadistas del ISIS-K.
EEUU permanece desde hace días en alerta máxima y el presidente estadounidense, Jose Biden, fue informado esta semana durante una reunión con su equipo de seguridad nacional de que los últimos días de los militares de EEUU en Afganistán podrían ser los "más peligrosos hasta la fecha".
Miles de afganos intentan salir
Mientras tanto, las oportunidades para los miles de afganos que intentan salir de Kabul están a punto de expirar a tan solo dos días de que concluya el plazo de la retirada de las fuerzas internacionales y cuando varios países han detenido ya sus vuelos de evacuación.
"La evacuación ya prácticamente terminó, Estados Unidos en estos momentos solo está evacuando a sus ciudadanos, son los únicos a los que se les permite entrar al aeropuerto, así que los afganos no pueden entrar a las instalaciones tras el atentado del jueves", ha explicado a Efe el director de la Organización de Asistencia a Migrantes de Afganistán, Abdul Ghafoor.
Aún después de la masacre en el aeropuerto que dejó decenas de cadáveres en las calles, cientos de personas acuden a la terminal donde todavía pesan alertas por nuevas amenazas de ataques terroristas.
"Todavía hay mucha gente esperando una oportunidad para irse, pero no creo que haya otra oportunidad. No hay forma de que puedan salir ahora", ha lamentado.
Solo ciudadanos extranjeros son permitidos en el aeródromo, y los talibanes tomaron el control de todas las entradas, por lo que las posibilidades de que afganos salgan en este momento, incluso aquellos en las listas para ser evacuados, son casi inexistentes.
"Tenemos miles de periodistas atrapados, que ahora están escondidos", entre otros muchos grupos vulnerables, ha explicado el activista, que asegura que las peticiones de ayuda no cesan.
La terminal aérea de la capital afgana ha estado por las últimos dos semanas rodeada de decenas de miles de personas que intentan entrar para abordar uno de los vuelos de evacuación, lo que ha mantenido el lugar en completo caos.
En busca de una "zona segura"
Entretanto, varios países europeos han reclamado seguir intentando evacuar a más personas. La ministra de Defensa española, Margarita Robles, aseguró este sábado que a pesar de que hayan concluido las labores de evacuación "España va a seguir trabajando para poder traer personas" y que se llevará a cabo un control para intentar que "no haya vulneración de derechos y libertades en el país".
En ese sentido, Robles consideró que "Occidente tiene una deuda pendiente con el pueblo afgano y no puede mirar hacia otro lado" y que "España va a estar ahí para que la comunidad internacional actúe" porque ha habido "102 hombres y mujeres militares que han muerto allí y su sacrificio no puede ser en vano".
También el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha recalcado este domingo que hay que tratar con los talibanes para asegurar la continuación de las evacuaciones en Afganistán.
"Ellos son los que tienen el control operativos de Kabul y del territorio y tenemos que discutir con ellos desde la comunidad internacional. Eso no prejuzga el reconocimiento", señaló Macron en una entrevista con el canal de televisión TF1.
Aún así, dejó claro que se la comunidad internacional exige a los talibanes tres condiciones: garantías a quienes tienen derecho a protección internacional, no cooperar con organizaciones terroristas y respeto a los derechos humanos y la dignidad de las mujeres.
También recordó que aún quedan "varios millares de personas" para evacuar, a pesar de que "hemos hecho el máximo que podíamos".
Francia y el Reino Unido presentarán este lunes en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas una propuesta para crear una zona segura en el aeropuerto civil de Kabul bajo control de la ONU, y a partir de ahí tratar de sacar a las personas que tienen derecho a protección internacional.
"Vamos a construir con nuestro socios una negociación con los talibanes" que consiga que esas personas "puedan dejar Kabul", recalcó.