Reino Unido está en alerta máxima ante la llegada de Eunice, una tormenta con vientos huracanados que, según la Oficina de Meteorología británica, "tiene peligro para la vida". Está provocando cortes eléctricos, retrasos en el transporte y escuelas del país se han visto obligadas a cerrar. Las autoridades británicas han pedido a la ciudadanía evitar desplazamientos.
Londres es uno de los puntos del país que más está sufriendo los estragos de la tormenta. El alcalde de la capital británica, Sadiq Khan, urgió este viernes a la población a no salir de sus casas ante los vientos extremos que está provocando la tormenta atlántica Eunice, que azota la mitad sur del Reino Unido desde la pasada madrugada con ráfagas de hasta 190 kilómetros por hora.
"Pido a todos los londinenses que se queden en casa, no asuman riesgos y eviten viajar a no ser que sea absolutamente esencial", declaró el alcalde en un comunicado, después de que la Oficina de Meteorología británica (Met Office) extendiera esta noche al sureste de Inglaterra la "alerta roja" que ayer había establecido para las costas del suroeste de Gran Bretaña.
Cientos de vuelos y trayectos ferroviarios han sido cancelados durante la jornada, en la que también cientos de escuelas han cerrado para evitar daños por una tormenta que ha dejado hasta ahora al menos dos heridos en Inglaterra. Los aeropuertos londinenses de Heathrow y Gatwick han pedido a los pasajeros que verifiquen el estado de sus viajes debido a que algunas aerolíneas cancelarán vuelos a causa del mal tiempo. La aerolínea holandesa KLM ha indicado que cancelará al menos 170 vuelos entre Londres y el aeropuerto de Ámsterdam.
El pabellón O2 Arena de la capital británica, con capacidad para eventos de hasta 20.000 personas, sufrió importantes daños en su cubierta que obligaron a evacuarlo y a cancelar el concierto de la banda Fugees que estaba programado para esta noche.
El secretario de Estado del Ministerio del Gabinete Michael Ellis preside esta tarde una reunión del gabinete de emergencias civiles del Gobierno británico para evaluar la respuesta a la tormenta.
La tormenta Eunice también ha golpeado fuertemente a Irlanda, donde más de 80.000 hogares y comercios están actualmente sin electricidad. Los peores efectos de la tormenta se han sentido en el suroeste de la isla, donde las rachas de viento han alcanzado los 130 kilómetros por hora. Ferris con destino Reino Unido, Francia y España se han visto obligados a cancelar sus travesías.
Países Bajos en alerta
Por su parte, las autoridades neerlandesas han emitido este viernes la alerta roja en todo el oeste de Países Bajos ante la llegada de Eunice, lo que ha llevado a la cancelación de vuelos y la paralización del tráfico ferroviario, así como el cierre de algunas escuelas y centros de vacunación en gran parte de país. Tres personas ya han muerto por la caída de árboles en Paíes Bajos.
La alerta roja declarada por el Real Instituto Meteorológico de Países Bajos (KNMI) se aplica en las regiones de Zelanda, Holanda del Norte y del Sur, Frisia y Flevoland, así como la zona del Mar de Frisia, mientras que en el resto del país se aplica la alerta naranja, a excepción de la provincia de Limburgo, en la frontera con Alemania y Bélgica.
Las compañías ferroviarias paralizarán a las 14.00 hora local (13.00 GMT) de este viernes todo el tráfico de trenes nacionales e internacionales esta tarde, aunque el horario reducido por tormentas ya se aplica desde primera hora.
La recomendación nacional es limitar los viajes, también por carretera, por motivos de seguridad, pues “hay una alta posibilidad de caída de árboles, lo que puede causar situaciones peligrosas”, señaló la compañía de trenes NS en un comunicado.
La mayoría de los autobuses funcionarán a lo largo de la jornada, según los transportistas regionales, pero se comprobará para cada ruta si es seguro utilizar la carretera.
El tráfico aéreo también se verá afectado por la tormenta y la aerolínea neerlandesa KLM indica que habrá una “operación muy limitada” para la compañía en el aeropuerto Schiphol de Ámsterdam, por lo que se esperan cancelaciones y retrasos en los vuelo, y recomienda a los viajeros que consulten su página web antes de la salida de su vuelo.
Dado que se espera que la fuerza del viento no disminuya hasta la noche, muchas escuelas han optado voluntariamente por mantener cerradas sus puertas y la mayoría de los centros de vacunación y test de Covid-19 cerrarán a comienzos de la tarde, según la televisión pública neerlandesa.