Rusia abandonará su objetivo de "desnazificación" de Ucrania y está dispuesta a permitir que el país ingrese en la Unión Europea si Kiev se mantiene neutral militarmente y renuncia a entrar en la OTAN, algo a lo que Ucrania está dispuesta.
Por su parte, Rusia ha anunciado que reducirá la actividad militar en torno a Kiev y la asediada ciudad septentrional de Chernígov tras las negociaciones celebradas este martes en Estambul con la delegación ucraniana.
Las delegaciones de Rusia y Ucrania han reanudado la negociación hoy para tratar de poner fin a la guerra. La reunión se ha producido en la oficina presidencial del Palacio de Dolmabahçe de Estambul, en Turquía. En ella, Kiev y Moscú han analizado un acuerdo de paz que prevé que Ucrania no ingrese en la OTAN, a cambio de obtener "garantías de seguridad" por parte de varios países.
Esos países serían los del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas -Reino Unido, China, Rusia, Estados Unidos y Francia-, así como Turquía, Alemania, Canadá, Polonia e Israel.
El borrador de este pacto no contiene, prosigue el FT, referencia alguna a la "desnazificación", "desmilitarización" y protección para el idioma ruso en Ucrania, motivos, entre otros, esgrimidos por el presidente ruso, Vladímir Putin, para justificar su agresión bélica y la invasión del país vecino.
Estas informaciones ven la luz cuando las delegaciones de Rusia y Ucrania se reúnen este martes en la Oficina Presidencial del Palacio de Dolmabahçe de Estambul. Allí han sido recibidas por el presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, que ha expresado su confianza en un alto el fuego definitivo que a su juicio "beneficiaría a todos".
"Todo el mundo está esperando buenas noticias de ustedes", ha afirmado Erdogan ante los emisarios rusos y ucranianos. El presidente turco ha querido aclarar que su país "no mediará", pero que sí quiere "facilitar" una solución al conflicto.
Las conversaciones tienen lugar a puerta cerrada y sería una buena señal que se prolongaran hasta la noche hasta interrumpirse para continuar este miércoles. Rusos y ucranianos se alojan en hoteles cercanos a Dolmabahçe y se prevé que la reunión dure al menos un par de días.
Mientras tienen lugar estas reuniones, el Gobierno de Ucrania ha aconsejado a los miembros de su delegación presentes en Estambul que "no coman ni beban nada" para evitar un posible envenenamiento.
Sin armas nucleares
Según publica Financial Times, las concesiones supuestamente planteadas por el Kremlin son consecuencia de la falta de avances en su campaña militar, que se ha topado con "una resistencia ucraniana más feroz" de lo previsto.
El diario británico también señala que el citado borrador de acuerdo prevé que Ucrania no desarrollará armas nucleares ni albergará en su territorio bases militares extranjeras, además de que abandonará cualquier intento por ingresar en la Alianza Atlántica.
A cambio, Kiev obtendrá "garantías de seguridad" de varios países, entre los que figuran Rusia, Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, China, Italia, Polonia, Israel y Turquía. "Queremos un mecanismo internacional que funcione, similar al artículo 5 de la OTAN", dijo el jefe de la delegación ucraniana, David Arahamiya, a la prensa en Estambul.
"Nos gustaría que los países garantes fueran los del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas -el Reino Unido, China, Rusia, Estados Unidos y Francia-, así como Turquía, Alemania, Canadá, Polonia e Israel", detalló el parlamentario.
Un hipotético acuerdo de paz, recuerda el FT, debe de ser refrendado "por garantes" -aún por designar- y por los respectivos Parlamentos, tal y como ya indicó el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, este domingo.
El borrador del acuerdo deja a un lado, de momento, uno "de los asuntos más controvertidos", que se refiere a las reclamaciones de Kiev de los territorios ucranianos anexionados por Rusia en 2014, un asunto que, según las cuatro fuentes del FT, podrían abordar personalmente Putin y Zelenski "más adelante".
Posible envenenamiento
Además de los contactos vía telemática, por el momento las delegaciones se han reunido de forma presencial en tres ocasiones -el 28 de febrero, el 3 de marzo y el 7 de marzo- en territorio bielorruso, a las que hay que añadir el encuentro entre los ministros de Exteriores Serguéi Lavrov y Dmitro Kuleba el 10 de marzo en Antalya, también en Turquía.
Este lunes, víspera de la trascendental cita por la paz en Ucrania, The Wall Street Journal publicó que el magnate ruso Roman Abramovich y dos enviados ucranianos que participaron en las negociaciones con Moscú desarrollaron síntomas de un posible envenenamiento.
Según el medio, Abramovich y sus interlocutores sufrieron enrojecimiento en los ojos, lagrimeo constante y molesto o descamación en la piel de la cara y las manos. Sus vidas no corren peligro.
A raíz de este episodio, Ucrania ha recomendado a sus enviados que "no coman ni beban nada" y a ser posible que ni siquiera "toquen superficies" durante la reunión.