Las fuerzas de seguridad israelíes han cargado contra los asistentes al funeral de la periodista Shireen Abu Akleh’s, asesinada en la noche del miércoles por fuego israelí durante una redada del Ejército en la ciudad de Yenín, al norte de Cisjordania ocupada. Varias personas sujetaban el ataúd de Abu Akleh del Hospital Francés St Louis en el barrio Sheikh Jarrah de Jerusalén Este ocupado, hasta la iglesia en la que se iba a celebrar el funeral, cuando las fuerzas de seguridad se abalanzaron sobre ellas.
Los vídeos divulgados en las redes sociales y en la televisión Al Jazeera, en la que trabajaba la periodista, se ve como la policía israelí carga contra los presentes en el funeral y les arrinconan hasta que el ataúd se resbala y se cae.
Según Al-Jazeera, las tropas israelíes justificaron su acción diciendo que "no estaba permitido" caminar con el ataúd hasta la iglesia, como estaban haciendo los particpantes en el funeral.
En las primeras horas tras el asesinato, las fuerzas israelíes y el propio primer ministro Naftali Bennett, difundieron un vídeo que supuestamente demostraba que la periodista había sido asesinada por terroristas palestinos, pese a que ninguno de sus compañeros de prensa presentes en el lugar confirmó esa versión.
De hecho, una investigación en el terreno de una ONG israelí B'Tselem ha desmentido esta versión, señalando que era imposible que la periodista hubiese sido alcanzada desde el lugar donde habrían disparado los palestinos.
La sobrina de Abu Akleh, Lina Abu Akleh, ha señalado que las fuerzas israelíes “todavía están tratando de silenciar” a su tía y a las personas reunidas para el funeral. “Incluso un funeral en nuestro país en Palestina no transcurre en paz, lamentablemente había varios puestos de control israelíes en el camino al hospital que prohibían que los autos llegaran al hospital, también están limitando la cantidad de autos que pueden llegar a la Puerta de Jaffa al lado del iglesia”, le dijo a Al Jazeera.
"Esto demuestra que a pesar de que la silenciaron al asesinarla, todavía están tratando de silenciar y evitar que la gente esté con nosotros, brindándole su amor y apoyo, y honrando su legado durante esta horrible tragedia”, dijo.