Los accidentes ocurren y el remedio, como suele decirse, puede ser en ocasiones que la enfermedad. No es habitual, pero de vez en cuando circulan las noticias sobre negligencias, equivocaciones o despistes que terminan con efectos inesperados. Los casos son residuales, pero alertan a la opinión pública.

En los últimos meses hemos visto ejemplos de infartos que se confunden con un ataque de ansiedad, otros en los que se llega a extirpar un órgano sano por confundirlo con tumores malignos o incluso quien fallece por una meningitis, algo curable, después de ser acusado de tomar drogas. Hasta ha habido quien sufre un ictus y se le diagnostica una otitis.

Hay otras variantes de estas catástrofes inesperadas que no tienen que ver tanto la labor de los profesionales, sino por una cadena de errores que acaban en un desenlace fatal. Es el caso de una niña de seis años en México. El accidente se produjo este lunes, 10 de julio, y las espeluznantes imágenes se han propagado por redes sociales y medios locales. En ellas, se puede ver a varios testigos gritar, incapaces de detener lo que terminaría en tragedia.

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Una tragedia que tuvo lugar en el Hospital General de Zona número 18 de Playa del Carmen, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Un centro que está situado en el estado de Quintana Roo de México, al este del país. Aquí, la paciente perdió la vida al ser aplastada por la puerta de un ascensor cuando era trasladada en una camilla. Un fallo al activar el botón de subida provocó el imprevisto y la pequeña quedó atrapada, sin que se pudiera hacer nada por ella.

Al parecer, la niña estaba siendo derivada al área de hospitalización del centro médico y, al entrar al ascensor, la camilla no llegó a hacerlo del todo, por lo que cuando pulsaron el botón para subir, su cuerpo quedó inmovilizado y prensado. Los sanitarios presentes acudieron rápidamente al rescate, pero no pudieron sacarla a tiempo y la presión hizo imposible hacer algo por su vida.

Horas más tarde, el IMSS publicó un comunicado lamentando todo lo ocurrido y expresando sus condolencias a la familia de la niña. "Brinda y garantiza acompañamiento integral a la familia desde el primer momento", indicaron. Según su versión, se avisó de inmediato a las autoridades competentes, "brindando todas las facilidades necesarias para las acciones que correspondieren, con el fin de garantizar transparencia en este lamentable hecho". Además, aseguraron que el servicio de ascensor es llevado por una empresa externa.

Medios locales informaron de que la pequeña había sido ingresada el pasado lunes para recibir la atención adecuada debido a un malestar por culpa, supuestamente, del dengue. Mientras tanto, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo confirmó que una persona ya había sido detenida en el marco de la investigación y, al mismo tiempo, continúa el estudio de las causas del terrible accidente.

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El director general del IMSS, Zoé Robledo, ha indicado través de su cuenta de Twitter que hay en marcha "una investigación a fondo sobre los hechos" y que seguirán colaborando con las autoridades. "Seremos absolutamente transparentes con los resultados de las investigaciones", ha prometido.

Según expresa el comunicado del hospital, la menor recibió una atención médica "requerida y adecuada". Los padres de la niña han interpuesto una denuncia ante el Ministerio Público contra quienes resulten responsables y la Comisión de Derechos Humanos de Quintana Roo ha iniciado una queja de oficio contra el IMSS. La gobernadora del Estado, Mara Lezama, ha exhortado a la Fiscalía a que lleve a cabo realice una investigación "puntual, pronta y expedita".