El presidente y líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, de 73 años, ha sido trasladado a España para recibir asistencia médica. La información ha sido confirmada por fuentes diplomáticas a EFE, que han señalado que "el Sr. Ghali ha sido trasladado a España por razones estrictamente humanitarias, para recibir asistencia sanitaria", aunque declinaron ofrecer más detalles.
La revista internacional Jeune Afrique había informado este jueves que el político, de 73 años, padece una cáncer grave y estaría registrado bajo el nombre de Mohamad Benbatouch y con nacionalidad argelina en un hospital de Logroño.
Las distintas versiones sobre la salud de Ghali se producen apenas unas semanas después de que saliera a luz un rumor que se aseguraba que el responsable había resultado herido durante una acción militar a lo largo del muro de separación levantado por Marruecos en la antigua colonia española del Sahara Occidental.
Jeune Afrique señaló que Ghali había sido ingresado primero, a causa del cáncer, en un hospital de la ciudad meridional argelina de Tindouf, próxima a los campamentos de refugiados, donde recibió la visita del jefe del Ejército argelino, Said Chengriha, quien le acompañó durante las negociaciones para su supuesto traslado fallido a Alemania y después a Logroño, la capital de La Rioja, unos 300 kilómetros al norte de Madrid.
Ghali habría llegado a España en un avión medicalizado procedente de Argelia tras ser rechazado en Alemania y gracias a la intervención del presidente argelino, Abdelmedjid Tebboune, que habría pedido garantías al gobierno español de que no se le arrestará y juzgará en España por unos presuntos delitos cometidos cuando era el delegado saharaui en Madrid.
Consultado por Efe, el Polisario no ha negado ni desmentido la información, que se conoce escasas semanas después de que saliera a la luz un rumor que aseguraba que Ghali había resultado herido durante una acción militar a lo largo del muro de separación levantado por Marruecos en la antigua colonia española del Sahara Occidental.
La situación en la antigua colonia española es de alta tensión desde que el pasado 13 de octubre fuerzas armadas marroquíes penetraran en el paso de Guerguerat, que separa Mauritania del territorio ocupado por Marruecos en 1975, para desalojar a un nutrido grupo de saharauis que habían acampado en la pista para interrumpir un tránsito de mercancías por la zona que el Polisario denuncia como ilegal.
Apenas 24 horas después de la ofensiva, el secretario general del Frente Polisario y presidente de la RASD, Brahim Ghali, aseguró que suponía una violación del alto el fuego, consideró rota la tregua firmada en 1991 y ordenó reanudar los ataques.
La tensión en la zona se redobló el pasado 8 de marzo después de que el Polisario confirmara la muerte del jefe de la Guardia Nacional saharaui, Adah El Bendir, quien según la versión saharaui perdió la vida alcanzado por un misil marroquí cuando regresaba de una incursión bélica en la zona marroquí del muro.
Sidi Ougal, secretario general del ministerio de Seguridad y Documentación saharaui -servicios secretos- denunció días atrás que los drones utilizados por Marruecos en esas operaciones "son israelíes" y advirtió de que el Polisario "tiene capacidad para hacerles frente"