La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, denunció este martes que el país vive un "golpe de Estado" más "grotesco" que el que se dio contra el fallecido presidente Hugo Chávez en 2002 por parte del empresario Pedro Carmona y afirmó que, al igual que entonces, se están disolviendo los poderes públicos.
Ortega realizó estas declaraciones en una comparecencia desde el Ministerio Público en la que explicó las razones para no asistir al proceso de retirada de la inmunidad o antejuicio de mérito en su contra en el Supremo al considerar que no ha cometido delitos. La fiscal calificó de "ilegítimo" al máximo tribunal máximo tribunal.
La funcionaria, quien dijo no reconocer a la vicefiscal designada por el Supremo en su lugar, Katherine Harrington, reconoció que será apartada de sus funciones.
Aseguró que no va a "convalidar un circo" que va a teñir la historia de Venezuela de "vergüenza y dolor" pues la "decisión está cantada" por lo que reiteró: "No los reconozco".
Asimismo, señaló que solo tuvo acceso a su expediente el jueves pasado y que sus defensores solo pudieron asistir al Supremo a introducir una recusación del proceso en su contra este martes y que, de inmediato, los magistrados la declararon inadmisible.
Ortega indicó que con este acto del Supremo "quedará abierto el camino para aniquilar por vías violentas el descontento popular" y aseguró que la violencia no solo se observa con la agresión de manifestantes en la calle, sino también en "las acciones de las instituciones" que "perjudican a la colectividad".