El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, doctor en Sagradas Escrituras, está siendo víctima de una campaña de desprestigio por parte del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y sus seguidores. No es la primera vez que se convierte en el blanco de los ataques del régimen desde que comenzaron las protestas en Nicaragua. En esta ocasión, han difundido un audio con la supuesta voz del obispo conversando con un grupo de personas (se oyen murmullos de fondo) sobre opciones políticas ante elecciones futuras.
Con este audio, cuya procedencia no se explica, Laureano Ortega, hijo del presidente Daniel Ortega, ha acusado al religioso de golpista y terrorista. Su tuit ha sido acompañado de cientos de mensajes de trolls que han amenazado a Báez con cárcel e incluso con la muerte. Estos mismos, además, han arremetido contra personas relevantes en la red que publicaban mensajes de apoyo al obispo como es el caso de la conocida monja tuitera nicaragüense, Xiskya.
Este periódico, sin embargo, ha revisado el audio con un ingeniero en sonido mediante el software de edición izotope rx y ha demostrado que se trata de un archivo editado, con importantes fallos técnicos que ponen de relieve que se trata de la unión y edición de varias grabaciones distintas de la voz del prelado. En definitiva, la falsedad del audio queda de manifiesto.
1. Audio editado con postproducción. Se nota la postproducción porque está limitado (véase la parte superior del espectograma). Todo el audio tiene el mismo volumen: -0,2dB, el volumen máximo antes de saturar. Esto no es normal en un sonido grabado directo y continuo en un lugar.
2. Audio con demasiados fragmentos mal reparados. Este sonido contiene 1677 clicks reparados. En un audio grabado con grabadora de un teléfono móvil tendría que tener 0 o como mucho 2 errores, pero nunca esa cantidad. Se trata de vocales o consonantes que a las que les falta parte del sonido o de unión de sílabas mal realizadas, silencios a los que les falta la reverberación del final o inicio de los sonidos continuos, etc.
3. Un ejemplo de click reparado en el fonema “L”. El ataque de la “L” de normal es más explosivo, tendría que ser más recto, los huecos que se señalan en la imagen deberían estar rellenos. Eso es porque se ha quitado los sonidos que en su origen acompañaban esa palabra que inicia la voz.
4. Blancos de forma abrupta. Los silencios o blancos tienen ausentes su reverberación. Les falta la cola de ambiente. Se nota que los sonidos se han aislado de otros.
5. Puntos de edición demasiado apreciables. En la imagen podemos ver uno de los muchos puntos de edición que se aprecian. Vocaes y consonantes no bien resueltas.
6. Codificación baja adrede. Todo el audio ha sido codificado al modo más bajo posible para que perdiendo calidad no se note la mala edición realizada. Es como en una fotografía de baja resolución o pixelada en la que cualquier elemento que quitemos o añadamos con Photoshop, hace que se perciba menos la edición.
7. Faltan los BWF. Esta información es como los datos exif en fotografía. Deja constacia del día y hora en que se grabó, el dispositivo empleado, el editor utilizado para la edición, etc. Simplemente se han borrado los datos BWF del archivo.
La edición de este audio es indiscutible. Y si está editado, cualquier cosa pudo haber sido modificada en él. Nadie es capaz de hablar así, sin cadencias, sin reverberaciones, con vocales y consonantes a medias, silencios extraños, etc.
Báez nunca ha escondido su sentido crítico contra el régimen y ha denunciado las continuas violaciones de derechos humanos realizadas desde el 18 de abril por el gobierno nicaragüense. Ya sufrió un ataque físico en la ciudad de Diriamba donde fue herido en el brazo en el mes de julio junto al cardenal Brenes, el nuncio apostólico y otros prelados. A su vez, se ha ganado un masivo respaldo entre los nicaragüenses que apoyan su sentido de justicia y amor por su pueblo nicaragüense.