Clauvino da Silva, narco brasileño, líder de la organización brasileña Comando Vermelho, salía ya por la puerta de la cárcel de Bangu 3, en la zona oeste de Río de Janeiro, cuando los funcionarios le pararon.
El hombre, disfrazado con una máscara de silicona, una peluca de pelo largo, pantalones vaqueros y una camiseta rosa, se hacía pasar por su hija para, así, intentar escapar de la cárcel. Casi lo consigue, pero en el último momento, los agentes de policía lo descubrieron.
El plan era dejar a su hija de 19 años dentro de la prisión, aprovechando el horario de visitas de este sábado. Tras frustrarse el intento de fuga, Da Silva fue transferido a una unidad de máxima seguridad de la prisión y sufrirá, además, sanciones disciplinarias.
El Secretario de Estado de la Administración de Prisiones de Río publicó fotos que mostraban a Da Silva con una máscara de silicona y una larga peluca de cabello oscuro, con jeans ajustados y una camiseta rosa con una imagen de dibujos animados. También publicaron un video en el que se puede ver a Da Silva quitándose la máscara y parte de la ropa, y diciendo su nombre completo.