Ivanka Trump, la hija mayor del presidente electo de Estados Unidos, se ha visto envuelto en polémica por un posible conflicto de intereses entre su negocio privado y su papel en la transición de gobierno.

Ivanka, que forma parte del equipo que prepara el traspaso de poderes, apareció el domingo en el programa “60 minutos” de la cadena CBS con su padre y el resto de su familia -con la excepción del benjamín, Barron Trump- luciendo una pulsera dorada de su creación.

Al día siguiente, su compañía homónima envió un correo electrónico a periodistas de moda donde promocionaba el abalorio, valorado en cerca de 11.000 dólares, promoviendo el complemento ostentado en la primera gran entrevista de Donald Trump tras su victoria.

“Anexa va una alerta de estilo de Ivanka vistiendo su pulsera favorita de la Colección Metrópolis durante el fin de semana en 60 Minutos. Por favor, compártala con sus clientes y, por su puesto, no dude en ponerse en contacto si tiene preguntas”, lee el correo electrónico, divulgado por una periodista del New York Times en Twitter.

Otro reportero de la misma cabecera publicó el folleto que acompañaba al correo electrónico.

CBS informa de que, a raíz de la polémica, la firma de Ivanka Trump divulgó un comunicado donde aseguraba que “todavía estamos haciendo ajustes poselectorales”. Asimismo, la compañía dijo a CBS que la responsable había sido una “empleada bienintencionada” y que la firma está debatiendo “nuevas políticas” por la nueva situación generada por las elecciones.

En "60 Minutos", sin embargo, Ivanka aseguró que no formará parte de la nueva Administración cuando su padre tome las riendas del país.

Según NBC News, no es la primera vez que Ivanka aprovecha un evento de carácter político para promocionar su marca. Tras hablar en la Convención Nacional Republicana en verano, su firma hizo publicidad del vestido que había lucido, que se agotó con rapidez.

Noticias relacionadas