La actualidad británica y la política alemana con los refugiados han sido dos de los temas que el presidente electo de EEUU, Donald Trump, ha tratado en una entrevista que ha concedido simultáneamente al británico Times y al alemán Bild.
En lo relativo al 'brexit', Trump animó a otros países a que sigan el ejemplo británico y auguró un futuro con más estados que decidan escindirse de la Unión Europea. Para Trump, "lo único que quieren los británicos es su propia identidad" algo que, en su opinión, ha prendido la mecha de procesos similares en otros países. Por eso se mostró partidario con esta opción tras definirse como un "entusiasta" de Gran Bretaña.
"Miras a la Unión Europea y es Alemania. Básicamente es un vehículo para Alemania. Es por eso que pensé que el Reino Unido era tan inteligente en salir", aseguró.
Tras recordar que la UE fue creada en parte para enfrentarse comercialmente a EEUU, el presidente electo recalcó que para él es indiferente que los europeos estén unidos o separados. "Yo voy a seguir con el acuerdo comercial con Reino Unido cuando se dé el brexit. Soy un gran fan del Reino Unido. Vamos a trabajar muy duro para que se haga rápidamente y se haga correctamente. Bueno para ambos lados".
En cualquier caso, destacó, Estados Unidos y Reino Unido "seguirán trabajando muy duro" después de su toma de posesión al considerar a Londres como un claro aliado de su país. Además, su querencia por estas tierras es obvia y así quiso reflejarlo al desvelar que su madre, escocesa de nacimiento, está "muy orgullosa" de la reina Isabel.
Alemania y los refugiados
Un "error catastrófico". Por si quedaba alguna duda de su política con los inmigrantes en Estados Unidos, Donald Trump ha dejado claro que Europa debería seguir el mismo rumbo. Al menos Alemania y al menos, con los refugiados afeando la permisividad de Angela Merkel en este tema.
Aunque elogia a Merkel como "una de los más importantes jefes de Gobierno, con diferencia", también rechaza su política: "Pienso que ella ha cometido un error catastrófico permitiendo la entrada a todos esos ilegales", dijo el magnate en una de las frases con las que el diario británico adelanta la entrevista.
Trump subraya la necesidad de reforzar los controles fronterizos en Estados Unidos y no descarta que los europeos puedan verse afectados, dejando claro que no actuará como Alemania: "No queremos que venga gente de Siria que no sabemos quién es", añade.
Reducir el arsenal nuclear
En otro de los temas candentes, que afecta a las futuras relaciones de su país con Rusia, Trump ya ha venido dejando caer que si hay colaboración con Moscú no tendría sentido mantener las sanciones actuales al Gobierno de Putin. Lo nuevo es el anuncio de un hipotético acuerdo nuclear que incluya una reducción "muy sustancial" del armamento nuclear de ambas potencias.
El enfoque militar también se palpó al hablar de la OTAN, una organización que Donald Trump considera "obsoleta" porque "no nos está protegiendo del terrorismo".
Además, destaca que Washington está poniendo más medios que ningún otro sin hallar contrapartidas: "Muchos de los países de la alianza no están pagando lo que se supone, lo que creo que es muy injusto para nosotros". "La OTAN es muy importante para mi pero solo hay cinco países que están pagando. Cinco. No es mucho".
Amenazas a BMW
Menos complaciente se mostró Trump hacia los intereses alemanes. No sólo por sus palabras sobre Merkel sino por otra de las cuestiones que dejó en la entrevista, en este caso a Bild: la posibilidad de elevar los aranceles a BMW si, como parece probable, la firma de automoción construye una factoría en México para exportar a Estados Unidos. Es la misma idea y la misma reacción que hace días lanzó a la japonesa Toyota.
"Le diría a BMW que se olvide si quieren construir una fábrica en México y quieren vender coches en los Estados Unidos sin una tasa del 35%", responde al ser preguntado por los planes de la empresa alemana de abrir en 2019 una planta en el país vecino.
Trump recomienda a los alemanes que no "malgasten su tiempo y su dinero si quieren exportar a otro país", y les aconseja que construyan su fábrica en Estados Unidos.
El presidente electo reconoce que Alemania es un gran país fabricante y destaca todos los Mercedes Benz que se ven en la Quinta Avenida de Nueva York, pero lo considera "injusto" para su país. "¿Cuántos Chevrolets ven ustedes en Alemania. No muchos, quizá ninguno", añade.