Trump aumentará el gasto en Defensa de EEUU en 54.000 millones de dólares

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha prometido un "aumento histórico" del gasto militar para "reconstruir el mermado Ejército de los Estados Unidos de América cuando más se necesita".

"Esto es un mensaje al mundo, en estos peligrosos tiempos, de fuerza, seguridad y determinación estadounidenses", ha asegurado ante las cámaras. "Debemos asegurarnos de que nuestros valerosos hombres y mujeres tengan las herramientas necesarias para impedir la guerra y que cuando se les llame a las armas sólo hagan una cosa: ganar. Tenemos que ganar, tenemos que empezar a ganar guerras otra vez.

La prensa estadounidense sitúa el prometido incremento en 54.000 millones de dólares, en torno a un 10%, citando a fuentes de la Administración. El precursor de Trump, Barack Obama, propuso para el vigente año fiscal un presupuesto de más de 500.000 millones de dólares para el Departamento de Defensa.

Hablando desde la Casa Blanca, Trump ha recordado este lunes que durante su juventud "Estados Unidos nunca perdía una guerra" mientras que "ahora nunca ganamos". "Hay que ganar o simplemente no combatir", ha dicho recordando la intervención estadounidense en Oriente Próximo. "Nos hemos gastado seis billones de dólares (...). Y Oriente Próximo está mucho peor que hace 16-17 años".

En la campaña electoral Trump, que quiere aumentar la capacidad nuclear de EEUU, criticó la política del Gobierno de Obama en esta región, acusándolo de propulsar el auge del grupo terrorista Estado Islámico, así como la decisión de la anterior Administración republicana de invadir Irak.

Trump ofrecerá más detalles sobre sus planes en una intervención al Congreso programada para este martes y ha adelantado que presentará su propuesta presupuestaria a los legisladores en marzo. "Serán unos Presupuestos de seguridad pública y nacional", ha aseverado para luego indicar que recortará de otras partidas para costear la inversión en defensa.

El New York Times afirma que la propuesta presupuestaria incluirá grandes recortes a la Agencia de Protección Medioambiental (EPA) y el Departamento de Estado pero que buscará dejar sin tocar a la Seguridad Social.