En una entrevista con la cadena Fox, el presidente de EEUU, Donald Trump, ha explicado cómo dio la orden de atacar Siria la semana pasada durante una cumbre bilateral con China y cómo informó a su invitado, el presidente Xi Jinping, de la decisión.
Los líderes, que se reunían por primera vez en Florida, estaban comiendo "el trozo más bonito de tarta de chocolate que hayas visto", ha narrado Trump a la entrevistadora.
"Y me dieron el mensaje de que los barcos estaban en posición y cargados. ¿Qué haces? Y tomamos la decisión de hacerlo, con lo que los misiles estaban en camino".
Entonces, Trump dijo a su invitado lo que acababa de hacer. "Le dije, 'señor presidente, déjeme que le explique algo -esto durante el postre-: acabamos de lanzar 59 misiles'", ha rememorado. "Acabamos de lanzar 59 misiles dirigidos a Irak".
Preguntado por la presentadora, Trump se ha corregido y clarificado que los misiles iban a dirigidos Siria. Entonces, Xi se paró durante diez segundos y luego le pidió al intérprete que tradujera otra vez.
"No me pareció que fuera una buena señal", ha relatado Trump. "Y entonces me dijo: '[Con] cualquiera que use gases contra niños pequeños y bebés, está bien'. Le parecía bien".
La repentina ofensiva respondió a un supuesto ataque con armas químicas atribuido al régimen de Bachar al Asad que dejó decenas de víctimas.
El anterior presidente de EEUU, Barack Obama, estuvo a punto de emprender acciones militares en 2013 cuando más de 1.000 personas perdieron la vida en un ataque químico en zonas rebeldes de Damasco cuando Rusia propuso destruir el arsenal de Asad.
Pese la supuesta destrucción del arsenal, la ONU confirmó tres ataques con este tipo de armas en 2014 y 2015 por parte del régimen y la comunidad internacional apunta a que Asad está también detrás del perpetrado la semana pasada.
Tras la cumbre con Xi, Trump tuiteó que el encuentro había creado una "tremenda amistad". La Casa Blanca aseguró que sentaron las bases para futuras discusiones.
Este miércoles, Trump ha informado de que la noche anterior mantuvo una conversación telefónica "muy buena" con Xi sobre Corea del Norte.
Xi ha pedido solucionar el conflicto de manera pacífica y asegurado estar comprometida plenamente con la desnuclearización de Pionyang.