El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, castigó este martes a Irán por su comportamiento "provocador y desestabilizador" con una nueva ronda de sanciones, no vinculadas al acuerdo nuclear de 2015, mientras espera que su Gobierno concluya la revisión de ese pacto, cuyo cumplimiento ha vuelto a certificar.
Los departamentos del Tesoro y de Estado anunciaron las nuevas sanciones, que afectan a 18 individuos y entidades iraníes relacionadas con el programa de misiles balísticos de Teherán, el apoyo militar al Ejército y la Guardia Revolucionaria iraní, y los nexos con una organización criminal trasnacional.
Precisamente este lunes, el Gobierno de Trump certificó ante el Congreso que Irán sigue ajustándose a las condiciones del pacto que suscribió con otras seis potencias en 2015 para limitar su programa nuclear, aunque altos funcionarios de la Casa Blanca alertaron de que Teherán no está cumpliendo con el "espíritu" de ese acuerdo.
El Departamento de Estado debe informar al Congreso cada 90 días sobre si Irán está cumpliendo con sus obligaciones bajo el pacto multilateral, suscrito también por Francia, Reino Unido, Alemania, Rusia y China.
Pese a la certificación enviada al Congreso el lunes y a la que Trump se opuso hasta el último momento, el Gobierno "seguirá centrándose agresivamente en la actividad maligna de Irán, incluyendo su apoyo estatal en curso al terrorismo, su programa de misiles balísticos y los abusos de derechos humanos", dijo hoy el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin.
Estas nuevas sanciones anunciadas hoy "envían una fuerte señal de que Estados Unidos no puede tolerar y no tolerará el comportamiento provocador y desestabilizador de Irán", agregó Mnuchin en un comunicado.
Actividades malignas
En otra declaración similar, la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, señaló que Estados Unidos sigue "profundamente preocupado por las actividades malignas de Irán en todo Oriente Medio que socavan la estabilidad, seguridad y prosperidad regional".
Nauert denunció que Irán continúa "apoyando a grupos terroristas" como Hizbulá o Hamás "que amenazan a Israel y la estabilidad en Oriente Medio".
La mayoría de los afectados por las sanciones de hoy están acusados de participar en actividades de apoyo al Ejército iraní y a la Guardia Revolucionaria, así como en el robo de programas de software estadounidenses y occidentales vendidos luego al Gobierno de Teherán.
Mientras, las sancionadas por el programa de misiles balísticos son dos entidades iraníes.
Los activos en Estados Unidos de los 18 individuos y entidades iraníes castigados con estas sanciones quedan congelados y se prohíbe a los afectados hacer transacciones con estadounidenses.
"Un mal acuerdo"
Ya desde la campaña electoral, Trump "ha dejado muy claro" que considera que el pacto nuclear multilateral es "un mal acuerdo para Estados Unidos", como recordó este lunes el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer.
No obstante, el mandatario está a la espera de una revisión que encargó del pacto nuclear para fijar su estrategia futura y decidir qué hacer con él.
De acuerdo con The Washington Post, esa revisión debería estar completada antes de mediados de octubre, cuando se cumple de nuevo otro plazo de 90 días para que Estados Unidos certifique si Irán sigue cumpliendo su parte del acuerdo nuclear.
Mientras, el Senado de Estados Unidos aprobó en junio una ley con nuevas sanciones contra Irán que no suponen una violación del acuerdo nuclear.
Esa ley, que todavía necesita el visto bueno de la Cámara de Representantes y de la Casa Blanca, fija sanciones a cualquier persona o entidad extranjera que haga negocios con una organización ya designada por el Gobierno estadounidense por su conexión con el programa de misiles balísticos de Irán.