Victoria amarga para Donald Trump. El Tribunal Supremo ha decidido mantener la decisión de una corte inferior que impedía que el veto migratorio se aplicara a los abuelos y otros familiares que viajan a EEUU para ver a sus parientes.
Sin embargo, el alto tribunal permitirá a la administración aplicar estrictamente las restricciones a la acogida de refugiados.
En junio el Supremo decidió revivir parcialmente el veto migratorio del presidente republicano contra seis países de mayoría musulmana y los solicitantes de asilo. El tribunal matizó, aun así, que aquellas personas que demostraran vínculos legítimos con EEUU quedarían exentas. También se comprometió a decidir sobre su legalidad más adelante.
La semana pasada un juez federal exigió al Gobierno que permitiera entrar a los solicitantes ligados a organizaciones de acogida estadounidenses y que no aplicara el veto a una lista más larga de rangos de parentesco.
El Tribunal Supremo ha tumbado parte de la decisión, pero ha decidido mantener la protección a los abuelos y otros familiares.