Hope Hicks tiene sólo 28 años pero ya es la mujer más influyente en la Casa Blanca, después de Ivanka Trump, y una de las mejores pagadas con un sueldo de 179.000 dólares al año, a la altura del exconsejero y estratega Steve Bannon y el exjefe de Gabinete, Reince Priebus.
Hicks ha sido nombrada directora de Comunicación por Donald Trump con un currículum vinculado a la familia Trump y poca experiencia en comunicación. Eso sí, la joven está reconocida como una de las personas más leales al presidente, nunca trata de hacerle cambiar de opinión y, en temas de comunicación, no influye en el mensaje sino en suavizar las formas.
De hecho, Hicks ha sido una de las responsables del perfil de Twitter del presidente, uno de los principales canales de comunicación que utiliza el jefe de la Casa Blanca y donde más polémicas se han creado.
El principal vínculo de Hope con los Trump es a través de Ivanka, puesto que la nueva dircom de la Casa Blanca trabajó como modelo para una de las firmas de moda de la hija del presidente.
Concretamente, en 2012, trabajó para Hiltzik Strategies, la firma de relaciones públicas que representaba las líneas de moda de lujo de Ivanka. Pero no fue su única experiencia como maniquí.
A los 11 años, ella y su hermana fueron contratados para una campaña de Ralph Lauren y ya de adolescente trabajó para Ford. Y hasta fue la portada de un libro para adolescentes que se publicó hace unos años.
Su carrera política empezó al mismo tiempo que la de Trump que la rescató para su campaña de la oficina de relaciones públicas de su compañía inmobiliaria. Siendo presidente, creó un puesto de directora de Comunicación Estratégicas para 'Hopester' como le gusta llamarla Trump.
Es una de las mujeres más cercanas a Ivanka y, de hecho, ha compartido alguna cena de sabbat con el matrimonio, un privilegio reservado para el círculo más estrecho del presidente.
La revista Forbes la reconoció este año como una de las personas menor de 30 años más influyentes en EEUU.
Curiosamente, Hope Hicks no tiene cuenta en Twitter y su Instagram está cerrado para curiosos y sólo puede verse por sus amigos, entre los que se encuentra la propia Ivanka.