El todavía presidente de EEUU, Donald Trump, ha reconocido por primera vez públicamente la victoria de su rival, el demócrata Joe Biden, en las pasadas elecciones del 3 de noviembre. Y, a pesar de ello, doce días después de la votación y sin pruebas que lo respalden, continúa insistiendo en que la votación fue manipulada.
"Él [por Biden] ganó porque las elecciones estaban amañadas, con el voto tabulado por una empresa privada de la izquierda radical, Dominion", ha escrito Trump en su cuenta personal de Twitter.
En el mensaje, además, subraya que ganó "por mucho" en Texas y vuelve a acusar a los medios de comunicación de mentir y mantener silencio ante ello. Ante ello, como viene ocurriendo desde la noche electoral, Twitter ha intervenido el mensaje con un aviso de que el fraude electoral al que alude el mandatario está cuestionado.
Es más, al desplegarlo, lleva a una nota en la que la red social explica que el fraude electoral es extremadamente raro en EEUU, según los expertos en la materia. "Funcionarios y expertos advierten que la mayor interferencia en las elecciones estadounidenses, ya sea de actores nacionales o extranjeros, se produce en forma de campañas de desinformación, muchas de las cuales tienen la intención de generar desconfianza en el proceso electoral estadounidense", añade.
En otro tuit, Trump matiza que "él solo ganó a los ojos de los medios de noticias falsas". "¡No admito nada! Tenemos un largo camino por delante. ¡Fue una elección amañada!", continúa.
Según los últimos datos del Colegio Electoral, integrado por 538 miembros que deciden formalmente la Presidencia, Joe Biden ha ganado los comicios gracias a los 306 votos electorales frente a los 232 de Donald Trump.
A pesar de ello, el republicano ha promovido desde la noche electoral un mensaje de pucherazo, fraude y deshonra en las elecciones que ha calado más profundo de lo que podría esperarse entre sus votantes. Según una encuesta que el medio estadounidense Politico realizó entre el 6 y el 9 de noviembre, el 70% de los votantes republicanos no creen que las elecciones hayan sido libres y justas.
El 78% de los republicanos cree, según esta encuesta, que fue el voto por correo lo que condujo a un fraude electoral masivo: el 72% de los simpatizantes de Trump opina que esos votos fueron manipulados y hasta el 84% cree que esa manipulación fue en beneficio de Joe Biden.