El presidente de EEUU, Joe Biden, considera "improbable" que el misil que mató a dos personas en Polonia fuera disparado desde Rusia.
Estas declaraciones las ha realizado desde Bali, donde asiste a la reunión del G20, y tras reunirse con varios aliados del G7: "No quiero afirmarlo antes de que completemos una investigación, pero es improbable a la vista de las líneas de la trayectoria que fuera disparado desde Rusia", ha aclarado según informa Reuters.
La explosión en una instalación cerca de la frontera con Ucrania se produjo cuando Rusia estaba atacando una infraestructura energética cercana en territorio ucraniano y bombardeaba Kiev en uno de los ataques más duros de estos nueve meses de guerra.
La mayoría de los líderes mundiales reunidos en Indonesia no han querido hacer declaraciones contundentes a la espera de las conclusiones de la investigación que está realizando Polonia.
Sin embargo, según publica AP, los funcionarios estadounidenses creen que los hallazgos iniciales sugieren que el misil que estalló fue disparado por las fuerzas ucranianas contra un misil ruso que se aproximaba.
Horas antes de conocerse esta información, el presidente polaco, Andrzej Duda, había asegurado que "probablemente era un misil de fabricación rusa", pero no había evidencia concreta de quién lo disparó, y que se trataba de un incidente aislado.
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia ha negado que ningún misil ruso haya impactado en territorio polaco y describió tales informes como "una provocación deliberada destinada a escalar la situación".
Reunión de urgencia
El presidente de EEUU hizo estas declaraciones tras convocar una reunión de urgencia con varios miembros de la OTAN y representantes de la UE, entre ellos, el presidente español, Pedro Sánchez. También se incluyó a Japón, aunque no pertenece a ninguna de esas organizaciones.
Se espera que los embajadores de la OTAN se reúnan más tarde el miércoles.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres ha emitido una nota sobre lo ocurrido en Polonia en la que pedía una "investigación exhaustiva" sobre los hechos.
Guterres "está muy preocupado por los informes sobre la explosión de un misil en territorio polaco. Es absolutamente esencial evitar una escalada de la guerra en Ucrania", señaló el portavoz de la Secretaría General, Farhan Haq, en un escueto comunicado que ha recogido Efe.
El presidente español ha participado en estas reuniones internacionales en las que se quiere dar una imagen de unidad frente a Rusia: "Hoy, los líderes de Canadá, la Comisión Europea, el Consejo Europeo, Francia, Alemania, Italia, Japón, Países Bajos, España, Reino Unido y Estados Unidos se han reunido al margen de la Cumbre del G20 en Bali (...). Ofrecemos todo nuestro apoyo y asistencia con la investigación en curso de Polonia", han aseverado los líderes mundiales en una misiva difundida por la Casa Blanca estadounidense".
Los jefes de Estado y de Gobierno han acordado permanecer "en estrecho contacto" para determinar "los próximos pasos apropiados" a medida que avanza la investigación en Polonia, condenando a su vez "los bárbaros ataques" con misiles que Rusia ha perpetrado en las ciudades e infraestructura civil de Ucrania durante la jornada del martes, según informa Efe.
"Reafirmamos nuestro firme apoyo a Ucrania y al pueblo ucraniano frente a la agresión rusa en curso, así como nuestra continua disposición para responsabilizar a Rusia por sus descarados ataques contra las comunidades ucranianas, incluso mientras el G20 se reúne para tratar los impactos más amplios de la guerra", esgrime el comunicado conjunto.