"Todo es una pantomima y una persecución política". Esta es la idea que el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha repetido este viernes durante una rueda de prensa realizada desde la Trump Tower, su propiedad de la Quinta Avenida de Nueva York, apenas un día después de haber sido declarado culpable de los 34 delitos graves que enfrentaba por el caso Stormy Daniels.
"No ha sido un juicio justo. Este caso estaba amañanado desde el primer día", ha señalado el líder republicano en referencia a la condena por falsificar registros contables para encubrir el soborno a una actriz de cine porno durante la campaña para las elecciones de 2016. "Si pueden hacerme esto a mí, pueden hacerle esto a cualquiera", ha empezado Trump en un discurso improvisado de 33 minutos en el que no ha aceptado preguntas de los periodistas.
El histórico fallo del jurado, que le convierte oficialmente en un "criminal convicto" (felon), ha sido alcanzado por unanimidad. Sin embargo, el magnate no ha dudado en insistir en su inocencia. Tan convencido está, que ha anunciado que apelará el veredicto del jurado, aunque primero tendrá que esperar a escuchar la sentencia (que podría acarrearle hasta cuatro años de prisión) el 11 de julio.
No es la primera vez que el líder republicano critica el caso penal y al juez que lo ha supervisado. Tampoco es la primera vez que el candidato republicano a las presidenciales de noviembre denuncia que el procedimiento es un intento de obstaculizar su intento de volver a la Casa Blanca.
En esta ocasión, sin embargo, Trump ha tratado de explicar, sin grandes argumentos, las razones por las que cree que es inocente. Entre ellas, ha asegurado que "no nos permitieron traer a testigos, no nos permitieron hablar, no nos permitieron hacer nada". "El juez fue un tirano", ha añadido en alusión al juez Juan Merchan, presidente del tribunal.
En general, el republicano se ha salido del guion que lleva meses repitiendo y que se basa en insistir en que está siendo víctima de "una caza de brujas". A su juicio, los distintos asuntos pendientes que tiene con la justicia están directamente patrocinados por la Casa Blanca y por el actual mandatario (y rival demócrata) Joe Biden.
"Yo lidero las encuestas, saco mucha ventaja a Biden y por eso me está persiguiendo", ha alegado el presidenciable. En concreto, ha citado una encuesta del Daily Mail, realizada 'en caliente' tras conocerse el veredicto, que le da una ventaja de 6 puntos frente a su rival demócrata.En la misma línea, Trump ha calificado al Gobierno de Biden como "un grupo de fascistas que están destruyendo nuestro país". "Vivimos en un Estado fascista", ha denunciado.
Con todo, Trump ha finalizado sus declaraciones desviando la atención al día de las elecciones. "El 5 de noviembre es el día más importante en la historia de nuestro país", ha defendido. "Será el verdadero veredicto", ha concluido. Pero lo cierto es que Trump aún se enfrenta a otros tres procesos penales.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha sostenido en referencia al veredicto de culpabilidad recibido por Trump que "nadie está por encima de la ley" y consideró "imprudente y peligroso e irresponsable" que este sugiera que la decisión estuvo amañada.