"La entidad sionista será destruida". Este es el mantra que los ayatolás de Irán llevan semanas pronunciando como amenaza directa a Israel y este martes las advertencias suben de nivel. El presidente de Irán, Ebrahim Raisí, ha advertido que cualquier amenaza provocación que atente contra la seguridad de su país tendrá como resultado la "destrucción de Tel Aviv y Haifa".
Además, el mandatario iraní además llamó a Estados Unidos a retirar sus tropas de la región "por su propio interés". "La presencia de tropas extranjeras amenaza la seguridad regional, pero nuestras Fuerzas Armadas aportan seguridad cuando están presentes en la región", aseguró Raisí, que señala que sus Fuerzas Armadas "dan la mano a las naciones que intentan crear seguridad en la zona", en clara referencia a Arabia Saudí.
De hecho, hay que recordar que Teherán y Riad acordaron el pasado mes de marzo el restablecimiento de sus relaciones diplomáticas con un acuerdo que se cerró en Pekín con China como intermediario. Precisamente Israel ha pedido a China que interceda en este conflicto para evitar que Irán no logre avances en su programa nuclear.
[Así es el "apartheid" contra las mujeres de Irán: "intolerable e injustificable" para la ONU]
Destrucción de Haifa y Tel Aviv
"Los enemigos, especialmente el régimen sionista, ya han recibido el mensaje de que el menor error contra el país provocará una severa respuesta de las Fuerzas Armadas que tendrá como consecuencia la destrucción de Haifa y Tel Aviv", ha dicho Raisí en un discurso durante un desfile militar celebrado por Día Nacional de Ejército iraní.
Durante el desfile, cazas de combate sobrevolaron la capital iraní mientras que tropas desfilaron junto a tanques y otros armamentos frente al presidente iraní.
Las declaraciones de Ebrahim Raisí se producen después de que en las últimas semanas se haya incrementado la guerra encubierta que mantienen Irán e Israel. Israel considera a Teherán una "amenaza existencial" y ve con preocupación no sólo su programa nuclear, sino la expansión de sus capacidades militares en todo Oriente Medio, financiando y apoyando a milicias armadas en Líbano, Siria, Gaza o Irak.
Tel Aviv ha atacado con misiles Siria en cuatro ocasiones en las últimas semanas, unos bombardeos en los que murieron dos asesores de la Guardia Revolucionaria iraní, cuerpo de élite que prometió venganza por sus muertes. A la vez, Israel ha sufrido el lanzamiento de cohetes desde Gaza, Líbano y Siria.
Esta última amenaza de Raisí coincide con la visita a Israel de Reza Pahlavi, hijo del último sha, quien fue depuesto en la Revolución Islámica de 1979.
Pahlavi, quien se considera el príncipe heredero del país, se reunió con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, para renovar los antiguos lazos que mantenían Tel Aviv y Teherán durante el reinado de su padre, Mohamad Reza Pahlaví.
Israel pide a China que interceda
El ministro de Exteriores israelí, Eli Cohen, habló este lunes con su homólogo chino, Qin Gang, a quien pidió que use su influencia sobre Irán para "evitar que obtenga capacidades nucleares" ante el avance del programa atómico de la república islámica.
"Hablamos sobre el peligro del programa nuclear iraní, un peligro que comparten muchos países de la región, incluidos países que tienen relaciones diplomáticas con Irán. La comunidad internacional debe actuar de inmediato para evitar que el régimen del ayatolá en Teherán obtenga capacidades nucleares", indicó el ministro Cohen en un comunicado.
Una investigación de The Wall Street Journal publicada este fin de semana apunta a que el comandante de la Fuerza Quds, Esmaill Ghaani, se reunió en Beirut con los líderes del grupo libanés chií Hizbulá, así como con los de Hamás y la Yihad Islámica en los días previos al lanzamiento de cohetes a Israel la semana pasada desde Gaza, Líbano y Siria.
Además, la Agencia de Seguridad israelí arrestó este lunes a dos palestinos de Cisjordania ocupada que operaban para la Fuerza Quds reclutando palestinos para atentara desde dentro de sus fronteras contra objetivos israelíes; una nueva amenaza que Israel ve con preocupación mientras surgen nuevos grupos armados palestinos