La primera ministra británica, Theresa May, pidió este jueves al Estados Unidos liderado por el nuevo presidente Donald Trump que no se retire del mundo para evitar un "eclipse de Occidente", y le aconsejó "tener cuidado" con el líder ruso, Vladímir Putin.
En un discurso en Filadelfia, un día antes de reunirse con Trump en la Casa Blanca, May llamó a "renovar la relación especial" entre Estados Unidos y el Reino Unido, pero también subrayó la importancia de las alianzas multilaterales y pidió a su aliado que no se aleje de los problemas mundiales "cuando las amenazas son reales".
"Con el presidente Putin, mi consejo es relacionarse con él pero tener cuidado", aseguró May, al alertar sobre la creciente "asertividad" de Rusia y China "en los asuntos mundiales".
"Un Estados Unidos más envalentonado, con una confianza renovada, es bueno para el mundo. Un Estados Unidos fuerte y próspero puede liderar en el extranjero. Pero no pueden ni deben hacerlo solos", afirmó May al ofrecer la ayuda del Reino Unido.
Un papel "más global" para Londres
La primera ministra británica subrayó que, a pesar de la decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea (UE), le interesa que el bloque europeo "tenga éxito", y que su país quiere adoptar un papel "aún más global e internacionalista".
"Los días del Reino Unido y Estados Unidos interviniendo en países soberanos en un intento de rehacer el mundo a nuestra imagen y semejanza se han acabado. Pero no podemos quedarnos de brazos cruzados cuando las amenazas sean reales", alertó May.
En ese sentido, defendió la implicación en alianzas como la ONU y la OTAN, al tiempo que subrayó la necesidad de reformarlas, además del combate al Estado Islámico (EI) dentro de la coalición liderada por Estados Unidos.
También abogó por seguir implementando el acuerdo nuclear alcanzado con Irán por Estados Unidos, el Reino Unido y otras cuatro potencias, y que ha sido duramente criticado por Trump.
"El acuerdo nuclear fue controvertido, pero ha neutralizado la posibilidad de que los iraníes adquieran un arma nuclear durante décadas", argumentó May, que llamó a aplicarlo "rigurosamente".
La líder británica destacó que el suyo es "un país que siempre ha mirado más allá de Europa", y que tiene especiales "lazos de afinidad, lengua y cultura con Estados Unidos".
"Estoy encantada de que la nueva Administración haya convertido el nuevo acuerdo comercial entre nuestros países en una de sus primeras prioridades", sostuvo May, al recordar que ese tratado "debe funcionar para ambos lados y servir los intereses mutuos".
Trump dijo hoy, en otro discurso en Filadelfia, que negociará "muchos acuerdos comerciales" internacionales pero lo hará de "uno en uno", y se espera que este viernes converse con May en la Casa Blanca sobre los contornos de su nuevo tratado bilateral.
Tanto Trump como May hablaron ante la reunión invernal en Filadelfia de los senadores y congresistas republicanos, a los que la líder británica quiso subrayar sus firmes credenciales "conservadoras" y su confianza en la nueva etapa que ha emprendido EEUU con una Casa Blanca y un Congreso que comparten esa tendencia.