Las prioridades del Reino Unido ante su salida de la Unión Europea (UE) y las medidas sociales centraron los argumentos que ofrecieron hoy ante la audiencia de la BBC la primera ministra británica, la conservadora Theresa May, y el líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn.
A seis días para las elecciones generales del 8 de junio y con las encuestas cada vez más ajustadas, ambos respondieron de forma consecutiva a las preguntas del público, un formato adoptado por la cadena pública ante la negativa de May a participar en debates en la campaña.
Durante el programa, la primera ministra justificó esa decisión por su deseo de "escuchar a los electores" antes que "discutir con otros políticos".
La dirigente conservadora defendió la necesidad de un Gobierno sólido que garantice el "éxito" en las futuras negociaciones con Bruselas y acusó a la oposición de intentar frustrar ese proceso. "Creo que la opinión mayoritaria en el Reino Unido es que la decisión de salir está tomada. Se preguntó a los ciudadanos y eligieron salir (de la UE). Elijamos sencillamente a un Gobierno que se ponga manos a la obra y logre un buen acuerdo", sostuvo la primera ministra.
Escasa ventaja para May
May convocó unas elecciones anticipadas por sorpresa el pasado 18 de abril cuando los sondeos otorgaban a su partido una amplia ventaja frente a los laboristas, si bien en los últimos días esa ventaja se ha reducido.
Dos análisis divulgados esta semana por la firma YouGov otorgan a los conservadores una ventaja de tan solo tres puntos -42 % de los votos, frente a un 39 % de los laboristas-, y apuntan a la posibilidad de que los "tories" pierdan la mayoría absoluta en la Cámara de los Comunes.
Ante ese hipotético escenario, Corbyn hizo hincapié en que no tiene intención de buscar acuerdos para forjar un Gobierno de coalición con formaciones como el Partido Liberaldemócrata y el Partido Nacionalista Escocés (SNP). "Quiero formar un Gobierno laborista con mayoría para poder poner en práctica nuestro extraordinario programa, que puede otorgar esperanza y oportunidades a mucha gente", señaló.
May negó por su parte haberse "arrepentido" de convocar los comicios y respondió con rotundidad a un ciudadano que la acusó de haber llamado a las urnas por interés "político".
"En este puesto hago lo que creo que es mejor para el Reino Unido. Podría haber estado en el cargo durante otro par de años y no haber convocado unas elecciones. Tuve las pelotas de convocarlas", sentenció.
"Llevo en política bastante tiempo y creo que la encuesta importante en todas las elecciones es la que tiene lugar el día de la votación", agregó la primera ministra.
En el último tramo de su intervención antes de dejar paso al líder laborista, la dirigente conservadora subrayó que su programa electoral incluye medidas para mejorar el sistema sanitario y la educación en el Reino Unido.
Respeto por el referéndum
Corbyn insistió por su parte en que piensa respetar el resultado del referéndum del pasado 23 de junio si es elegido primer ministro, y se declaró preparado para guiar, junto con su equipo, el proceso negociador para abandonar el bloque comunitario.
Afirmó, además, que legislaría de forma "inmediata" a fin de garantizar los derechos de los ciudadanos europeos que viven en el Reino Unido, y destacó que su hoja de ruta en el diálogo con Bruselas pasaría por "mantener el acceso a los mercados europeos".
El líder laborista aseguró que si las urnas le otorgan la responsabilidad de liderar esas negociaciones, no se acercaría a la Unión Europea con una actitud "amenazante", sino que trataría de construir una relación de confianza para afianzar un acuerdo "razonable".
Cuestionado por sus políticas de inmigración, Corbyn recalcó que con un Gobierno laborista la libertad de movimientos de ciudadanos comunitarios "terminará" al abandonar la Unión Europea.
El líder laborista defendió, además, la necesidad de combatir "la contratación de grupos de trabajadores con bajos salarios de Europa central" que "minan las condiciones existentes" en el mercado británico, especialmente en el sector de la construcción.