El líder democristiano Leo Varadkar, hijo de un inmigrante indio y abiertamente gay, se ha convertido este miércoles en el primer ministro más joven de Irlanda, tras recibir el apoyo de la mayoría de la Cámara baja de Dublín (Dáil).
Varadkar, de 38 años, obtuvo 57 votos procedentes de su partido, el conservador Fine Gael, y de los diputados independientes que conforman el Gobierno que ha dirigido en minoría desde las elecciones de 2016 su antecesor en el puesto, Enda Kenny.
Su investidura como "taoiseach" (primer ministro) también ha sido posible por la abstención del otro gran partido nacional, el centrista Fianna Fáil, que se comprometió a apoyar a Kenny en momentos clave de esta legislatura tras aquellos comicios.
Por contra, se opuso a la investidura de Varadkar la tercera formación nacional, el Sinn Féin de Gerry Adams, quien aseguró que el líder democristiano continuará con las políticas de austeridad que marcaron los seis años de Kenny en el poder.
No obstante, el dirigente nacionalista le deseó suerte y confió en trabajar estrechamente con él para hacer frente a los principales desafíos que afronta el país, como la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) o la restauración de un Gobierno autónomo en Irlanda del Norte.
Primer discurso
En su primer discurso como "taoiseach", Varadkar, médico de profesión como su padre, ha afirmado que el Dáil le ha elegido "para liderar", pero, ha apostillado, "yo me comprometo a servir" a este país.
Rindió un homenaje a Kenny, a quien ha reconocido sus méritos para "reconstruir" la economía cuando accedió al poder en 2011, pocos meses después de que el Gobierno del Fianna Fáil pidiera un rescate a la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) por 85.000 millones de euros.
Varadkar también le ha agradecido que tomara decisiones durante su mandato para que gente como él pudiera sentirse un ciudadano más, en referencia al referéndum sobre el matrimonio homosexual convocado por Kenny en 2015, que convirtió a Irlanda en el primer país del mundo que lo aprobaba a través de una consulta popular.
Animado por la campaña de ese plebiscito, el nuevo "taoiseach", quien mantiene desde hace dos años una relación sentimental con otro médico, reveló su condición sexual apenas unos meses antes de aquella cita con la urnas.
Después de la sesión de investidura, Varadkar se desplazará hasta la residencia del presidente irlandés, Michael D. Higgins, para formalizar su nombramiento con el jefe del Estado, un puesto principalmente representativo.