El avión del presidente estadounidense, Donald Trump, ha aterrizado este jueves en París, en una visita durante la cual asistirá al desfile de la fiesta nacional francesa este 14 de julio y se entrevistará con el jefe del Estado, Emmanuel Macron.
Después de la soledad vivida en la reunión del G20, en la que chocó con el resto del los países asistentes, entre ellos Rusia, el presidente vuelve a Europa, esta vez a París, huyendo de la tormenta que sigue siendo la injerencia rusa en las elecciones presidenciales de su país.
Lo último ha sido la reunión que mantuvo en plena campaña electoral, su hijo Donald Trump Jr con una abogada rusa que iba a proporcionarle supuestamente información sobre Hillary Clinton, pese a ser alertado de que los datos venían del Kremlin.
Esta es la segunda vez que Trump y Macron se encuentran en menos de una semana, tras la cumbre de Hamburgo el pasado 7 y 8 de julio. Además, será una visita en la que intentarán rebajar las tensiones que se produjeron tras el anuncio del abandono del Acuerdo de París contra el cambio climático y las diferencias en materias de comercio.
El dirigente tiene previsto pasar la mañana del jueves en la embajada de Estados Unidos, en la plaza de la Concordia, donde mantendrá reuniones con responsables militares de su país. Por la tarde, será recibido por el presidente Macron en el Hotel de los Inválidos.
A continuación los dos mandatarios se dirigirán al Palacio del Elíseo, donde mantendrán un encuentro bilateral, al que se sumarán algunos de sus principales colaboradores, en el que está previsto que hablen de la lucha antiterrorista, la búsqueda de la estabilidad y, de nuevo, el cambio climático.
Poco antes de las 21.00 locales (19.00 GMT), las dos parejas presidenciales celebrarán una cena oficial en el restaurante Jules Verne de la Torre Eiffel.
Pero el día grande del viaje de Trump será mañana viernes 14 de julio, Día de la Bastilla cuando asistirá junto a su mujer al desfile militar de los Campos Elíseos.
Este año Francia ha querido rendir homenaje al centenario de la entrada de Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial y por ello el inicio de la parada corresponderá a militares estadounidenses.
En previsión de la visita de Trump, que coincide este jueves con un consejo de ministros franco-alemán y la presencia de la canciller, Angela Merkel, la Prefectura de Policía de París ha movilizado para estos dos días a cerca de 11.000 policías y gendarmes y a 2.500 bomberos, dentro de un dispositivo de seguridad que incluye cobertura aérea y fluvial.