El presidente francés, Emmanuel Macron, que quiere crear centros de identificación ("hotspots") de demandas de asilo en Libia a partir de este verano en los que se realice una 'criba' entre potenciales solicitantes de asilo e inmigrantes económicos.
La iniciativa busca evitar que la gente "asuma riesgos" innecesarios cruzando el Mediterráneo cuando no reúnan las condiciones para que se les reconozca ese estatuto, anunció al margen de una visita a un centro de acogida de refugiados en Orléans, en el oeste de París.
El mandatario avanzó que Francia quiere llevar a cabo esta iniciativa con Europa, pero destacó que, en caso contrario, su país seguirá adelante igualmente.
Macron, según declaraciones recogidas por los medios, apuntó que el objetivo es efectuar un tratamiento previo de las peticiones de asilo, en lugar de dejar que la gente "arriesgue su vida" al cruzar el Mediterráneo.
En Libia se concentran miles de personas que, después de un largo periplo por Oriente Próximo y, sobre todo, por África, esperan a embarcarse para alcanzar las costas europeas a través del mar Mediterráneo.
Las organizaciones humanitarias han denunciado que Libia no es un país seguro porque los recién llegados quedan a merced de las mafias de tráfico de personas que les someten a numerosos abusos para pagar su pasaje.
En cuanto a la inmigración en territorio francés, Macron añadió que de aquí a finales de año no quiere "a nadie en las calles" y expresó su intención de crear en "centros de alojamiento de urgencia" para ofrecer "a todo el mundo", en referencia a inmigrantes y demandantes de asilo, un hospedaje "digno".