La policía que investiga el incendio declarado el pasado junio en una torre residencial de Londres dijo este martes que la cifra inicial de 80 fallecidos puede ser menor tras las últimas investigaciones.
En un encuentro con la prensa el comandante Stuart Cundy, de la Policía Metropolitana de Londres (Met), señaló que han sido identificadas 60 víctimas mortales y explicó que la cifra exacta de muertos no se sabrá hasta que concluya la investigación policial.
Las imágenes de las cámaras de seguridad del edificio siniestrado, la torre Grenfell, muestran que 240 personas abandonaron el inmueble entre la medianoche y las 07.00 GMT del 14 de junio, cuando se produjo el suceso.
La Met investiga también ocho casos de reclamaciones fraudulentas relacionadas con el incendio y cuatro posibles robos cometidos en pisos de las plantas inferiores.
Según la policía, un frigorífico defectuoso causó el incendio en la torre de 24 plantas y 120 viviendas de protección social, situada en el oeste de la capital británica, en la que vivían entre 400 y 600 personas.
El fuego se extendió rápidamente, lo que dificultó la evacuación del edificio y provocó que mucha gente quedara atrapada en sus apartamentos.
Los expertos señalaron después que las llamas se extendieron con facilidad debido a que el revestimiento tenía material inflamable, lo que ha obligado a las autoridades a revisar el estado de otros edificios que, como la torre Grenfell, son de protección oficial.