Laurent Wauquiez ha sido elegido por los afiliados de Los Republicanos (LR) como el nuevo presidente del gran partido de la derecha francesa con una mayoría aplastante del 74,64% de los votos, que es la base para intentar convertirse en la práctica en el jefe de la oposición al presidente, Emmanuel Macron.
Según las cifras ofrecidas por la dirección de LR, 99.597 personas participaron en estos comicios internos, lo que supone un 42,46% de los que podían hacerlo por estar al día del pago de su cuota.
Actual presidente de la región Auvernia Ródano Alpes y antiguo ministro entre 2008 y 2012 durante la presidencia de Nicolas Sarkozy, Wauquiez tiene 42 años y es conocido por sus posiciones que en algunos puntos rozan las de la extrema derecha.
Muy lejos de él quedaron los otros dos candidatos que le disputaban la presidencia. Florence Portelli, alcaldesa de la localidad de Taverny en la región de París y antigua portavoz del candidato de LR para las presidenciales de la primera primavera, François Fillon, obtuvo el 16,11% de los sufragios.
Maël de Calan, consejero de su departamento de Finistère, en Bretaña, que había recibido el apoyo del exprimer ministro Alain Juppé, se tuvo que contentar con el 9,25%.
El secretario general del partido, Bernard Accoyer, valoró en una comparecencia el nivel de participación al recordar que algunos habían augurado que solo votarían entre 50.000 y 60.000 afiliados: "es un éxito para nuestra familia política" pero también "para la democracia en nuestro país".
En una primera declaración pública, Wauquiez dijo que los militantes habían dado "un mensaje sin ambigüedad. Podemos decir que esta noche la derecha ha vuelto".
Sus valores: trabajo y autoridad
"Sigo pensando que los valores de la derecha continúan siendo los de una mayoría de franceses", señaló, antes de citar entre otros "el trabajo" o "la autoridad". Y afirmó que la suya será una derecha "que no se avergüenza de sus valores".
Su aspiración de aparecer como el jefe de la oposición quedó clara cuando dedicó una parte de su mensaje a criticar a Macron porque "es pasivo con la cuestión de la delincuencia" y "le falta firmeza frente al integrismo islámico".
Wauquiez anunció que va a "sacar las lecciones de los fracasos" de su partido, en una alusión bastante evidente a los resultados en las elecciones presidenciales y legislativas de la pasada primavera.
Fillon ni siquiera consiguió calificarse para la segunda vuelta de las presidenciales, después de que se hiciera público el escándalo por los supuestos empleos ficticios que atribuyó a su mujer.
"El viejo paisaje político se ha hundido. Tanto mejor porque vamos a reinventarlo", indicó Wauquiez.