La Policía y los servicios de inteligencia británicos han identificado a los "sospechosos" que intentaron asesinar al exespía ruso Sergei Skripal y a su hija Yulia con un agente nervioso en la localidad de Salisbury. Según revela el diario The Daily Telegraph, los expertos en contraterrorismo han localizado a varias "personas de interés" que se cree que han regresado a Rusia y pueden ser los responsables del envenenamiento.
La principal línea de investigación se ha centrado en analizar la lista de pasajeros del avión que llegó de Moscú el 3 de marzo, un día antes del ataque, y en el que viajaba la hija del agente. La Policía también ha analizado una gran cantidad de imágenes de las cámaras de seguridad de Salisbury y rastreado matrículas de automóviles. Sin embargo, el periódico conservador no ha identificado a ninguno de los sospechosos por su nombre ni ha informado de cuántos son.
Las autoridades británicas tratan ahora de elaborar una estrategia para que la investigación criminal pueda llegar a procesar a los supuestos atacantes de los Skripal. Esto se presupone un proceso laborioso, por no decir imposible, en un momento de escalada de las tensiones diplomáticas entre Reino Unido y Rusia. Según el citado diario, los investigadores han admitido las enormes dificultades para presentar cargos contra estas "personas de interés", algo que aumentaría las fricciones entre Londres y Moscú.
Después de varias semanas analizando las pruebas sobre el terreno, los investigadores creen que Sergei Skripal, el doble agente ruso, y su hija fueron intoxicados al entrar en contacto con el Novichok, un agente nervioso de origen militar, que habría sido rociado en el pomo de la puerta de la casa donde vivía. Asimismo, también han señalado que el correo electrónico de Yulia había sido monitorizado por los servicios de inteligencia rusos antes de viajar a Reino Unido para visitar a su padre.
Alexander Yakovenko, el embajador ruso en la capital británica, ha salido al paso de esta información acusando a Londres de violar las leyes internacionales y ocultar las pruebas del caso Skripal: "Tenemos la impresión de que el Gobierno británico está siguiendo la política de destruir deliberadamente la evidencia del caso".
Hace unos días, Yulia Skripal recibió el alta médica para abandonar el hospital en el que estuvo ingresada desde que se produjo el envenenamiento. La salud de su padre también ha mejorado y ya ha salido del estado crítico. Estados Unidos tiene pensado proporcionar a los Skripal nuevas identidades para evitar otro ataque.