La UE aprueba una declaración descafeinada que pide a Maduro urnas sin concretar plazo

Tras casi 24 horas de desacuerdos y tiras y aflojas, la Unión Europea ha aprobado por fin este sábado una nueva declaración descafeinada sobre Venezuela en la que exige al Gobierno de Nicolás Maduro que convoque elecciones "en los próximos días". Si las autoridades venezolanas ignoran este vago ultimátum, los Veintiocho se plantearán el reconocimiento del líder opositor Juan Guaidó como presidente legítimo para que sea él quien organice los comicios.

"La UE pide enérgicamente la celebración urgente de elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles de acuerdo con los estándares democráticos internacionales y del orden constitucional de Venezuela", señala el comunicado firmado por la jefa de la diplomacia comunitaria, la socialista italiana Federica Mogherini, en nombre de los Veintiocho.

"Si no se anuncia la organización de nuevas elecciones con las garantías necesarias en los próximos días, la UE adoptará medidas adicionales, incluida la cuestión del reconocimiento del líder del país en línea con el artículo 233 de la Constitución venezolana", apunta el texto, que en ningún momento en sus seis párrafos menciona a Guaidó por su nombre. El artículo 233 dice que en caso de falta absoluta del presidente del país por causa de muerte, incapacidad, renuncia o destitución, corresponde al presidente de la Asamblea Nacional (es decir, a Guaidó) organizar elecciones.

La declaración conjunta de la UE se queda muy corta respecto a la posición común anunciada este sábado por España, Francia, Alemania y Reino Unido. Los tres países sí han fijado un plazo concreto (ocho días) en su ultimátum a Maduro y han sido más contundentes sobre el posible reconocimiento de Guaidó como presidente legítimo. España prefería un reconocimiento inmediato y aceptó este enfoque en dos fases (propuesto por París y Berlín) para facilitar el consenso.

Pero las reticencias de Grecia (cuyo partido gobernante, Syriza, apoya a Maduro), Italia o Austria han obligado a suavizar todavía más el comunicado de la UE, según fuentes diplomáticas. Las decisiones en materia de política exterior se adoptan por unanimidad, lo que fuerza siempre a buscar el mínimo común denominador entre los 28 Estados miembros y ralentiza las reacciones de la UE. En contraste, Estados Unidos, Canadá y la mayoría de los países latinoamericanos reconocieron a Guaidó minutos después de que éste se autoproclamara presidente el miércoles.

La Asamblea Nacional, único órgano legítimo

En su comunicado, la UE resalta que las elecciones presidenciales del pasado mayo en las que Maduro basa su legitimidad "no fuero ni libres, ni justas ni creíbles y carecen de legitimidad democrática". Es la forma enrevesada que tienen los Gobiernos europeos de decir que no reconocen la autoridad del sucesor de Hugo Chávez. "El país necesita urgentemente un Gobierno que represente de verdad la voluntad del pueblo venezolano", asegura Mogherini.

En contraste con la censura a Maduro, los Veintiocho "reiteran su pleno apoyo a la Asamblea Nacional, que es el órgano democrático legítimo de Venezuela y cuyos poderes deben restaurarse y respetarse, incluyendo las prerrogativas y la seguridad de sus miembros". Y condenan la violencia de los últimos días de las fuerzas de seguridad venezolanas contra los manifestantes, además de ofrecer su pésame a los familiares de los fallecidos.

"Reafirmamos nuestra profunda convicción de que una solución democrática pacífica e inclusiva es la única salida sostenible al actual bloqueo político y la grave crisis social que ha provocado (...) La UE está con el pueblo venezolano en esta hora crítica", concluye la declaración.

Los ministros de Exteriores de los 28 volverán a abordar la crisis de Venezuela durante la reunión informal que celebran en Bucarest los próximos 31 de enero y 1 de febrero. Además, la UE intensificará en las próximas horas la coordinación con sus socios latinoamericanos e internacionales con el fin de crear un Grupo de Contacto Internacional que pueda ejercer un papel de mediación.