"Es un fracaso y una tragedia". La definición es de Jean-Claude Junker y señalaba la fecha de activación del artículo 50 del Tratado, en 2017,que ponía en marcha la salida de Reino Unido de la Unión Europea. El divorcio debería hacerse efectivo en dos años: el 29 de marzo de 2019.
Dos años han pasado pero la separación no se ha consumado. El Parlamento británico vetó los acuerdos alcanzados entre la primera ministra británica, Theresa May, y la Unión Europea y el proceso de separación se sumió en el caos. Ahora mismo la UE le ha concedido a reino Unido una prórroga hasta el 22 de mayo para que intente ratificar la legislación y lograr una salida ordenada de la UE.
Sin embargo, el acuerdo no parece que vaya a ser fácil. El 29 de marzo era la fecha clave, la que marcaría la ruptura definitiva de un idilio europeo que duró más de 40 años. El día en que se cumple la fecha, pero no se vislumbra una solución, repasamos los escenarios si, tal y como estaba previsto, el Reino Unido hubiese dejado ya de pertenecer a la UE.
1. Periodo de transición
A partir de este viernes se establecería un periodo de transición, que se extendería hasta el 31 de diciembre de 2020, ideado para facilitar los ajustes, y durante el cual no habría demasiados cambios en la relación entre Reino Unido y la Ue.
2. Indemnización a la UE
El acuerdo también definía la cantidad de dinero que Reino Unido le tendría que pagar a la UE, para hacer frente a los compromisos asumidos como estado miembro de la Unión: ascenderían a unos 45.000 millones de euros.
3. Derechos de los ciudadanos
Tanto la Unión Europea como el reino Unido se comprometían a respetar los derechos de los ciudadanos que viven y trabajan en sus territorios. Esto significa que los británicos que viven y trabajan en suelo europeo y los europeos que viven y trabajan en suelo británico seguirían manteniendo sus mismos derechos.
4. La unión aduanera y la frontera en Irlanda
El punto de discordia en el acuerdo. La ausencia de barreras físicas entre Irlanda e Irlanda del Norte, una de las bases del acuerdo de paz que acabó con la violencia del IRA podría verse afectada con la salida de el Reino Unido (y, en consecuencia, de Irlanda del Norte). Para que las barreras físicas no volvieran a levantarse, la UE y Reino Unido han introducido una "salvaguarda" en el acuerdo según la cual, mientras no se encuentre una alternativa, Reino Unido se debería mantener en la unión aduanera.
Se trata de un punto inaceptable para el Partido Unionista Democrático, esencial para el Gobierno de May, que no logró el apoyo en el Parlamento.
El escenario ahora sigue siendo de incertidumbre. Este viernes los diputados británicos volverán a debatir el viernes sobre el acuerdo de 'brexit' negociado por la primera ministra Theresa May que ya rechazaron dos veces.