Sánchez pierde su pugna por la Comisión y postula a Borrell como jefe de Exteriores de la UE

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que negocia en nombre de los socialistas europeos el reparto de altos cargos de la UE, ha perdido la pugna para aupar a su candidato, Frans Timmermans, como presidente de la Comisión Europea. El nombre de Timmermans, que figuraba como favorito para el cargo desde el pasado domingo, ha sido definitivamente descartado este martes por los líderes europeos. Como premio de consolación, Sánchez postula ahora al ministro de Exteriores, Josep Borrell, como nuevo jefe de la diplomacia europea, según confirman fuentes europeas.

Borrell figura en estos momentos como Alto Representante de la Política Exterior y de Seguridad Común en la última lista de altos cargos que negocian ahora en Bruselas los jefes de Estado y de Gobierno de los 27. En esta lista, la ministra alemana de Defensa, Ursula von der Leyen (60 años), sería la nueva presidenta de la Comisión Europea. Se trata de una candidata sorpresa que han pactado la canciller Angela Merkel y el presidente francés Emmanuel Macron, según la prensa alemana. 

Todavía este martes por la mañana, Sánchez aseguraba a la prensa que su prioridad era colocar a Timmermans como presidente del Ejecutivo comunitario. Para conseguirlo, forjó una alianza con los liberales de Macron. Pero la candidatura del holandés ha chocado con la oposición del bloque del Este, Italia y parte del Partido Popular Europeo. Al final, el presidente francés ha dejado tirado a Sánchez y ha pactado con Merkel.

De los cinco puestos en juego, el de Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad común es el que nadie quería, un premio de consolación. El nombre de Borrell circuló desde el primer día porque es la cartera que más se corresponde con su actual perfil de ministro de Exteriores. Pero ni siquiera en Moncloa estaban convencidos de que mereciera la pena dar la batalla: preferían una vicepresidencia económica potente en la Comisión.

Es un cargo con nulo poder y escasa influencia, ya que las decisiones en esta materia se adoptan por unanimidad y la voz cantante la llevan París, Berlín y hasta ahora también Londres. Nadie fuera de la burbuja bruselense conoce a Mogherini, de cuyo nombramiento se ha arrepentido incluso su valedor, el ex primer ministro italiano Matteo Renzi. El español Javier Solana ya fue Alto Representante entre 1999 y 2009.

La lista pactada por los jefes de Estado y de Gobierno sitúa a la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, como nueva presidenta del Banco Central Europeo en sustitución de Mario Draghi. El primer ministro belga, Charles Michel, será el presidente del Consejo Europeo, mientras que la Eurocámara se la turnarán los socialistas y los populares.

Este reparto, que todavía puede cambiar, cuenta con un gran consenso entre los jefes de Estado y de Gobierno. El último escollo pendiente es convencer al Parlamento Europeo, que tiene muchas dudas sobre la candidatura de Von der Leyen. Pero el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, es optimista. "Estamos cada vez más cerca", ha escrito en tuiter. La cumbre dura ya tres días.