El primer ministro británico ha causado el caos político con su última decisión de suspender la actividad del Parlamento británico durante más de un mes. Las reacciones dentro y fuera del Reino Unido no se han hecho esperar. La oposición habla de "golpe" y "ataque a la democracia", el presidente de la Cámara de los Comunes de "escándalo constitucional" y se han organizado manifestaciones en contra de esta decisión de Boris Johnson por todo el país.
Los diputados británicos vuelven al trabajo el 3 de septiembre tras el periodo de vacaciones de verano, pero será sólo para una semana, pues la suspensión que ha decretado la Reina, tras la petición de Johnson, comienza el 10 de septiembre. La oposición y los partidarios de un brexit pactado ven en este movimiento una estratagema que atenta contra la democracia.
¿Qué es la suspensión?
La suspensión del Parlamento británico que Boris Johnson ha pedido a la Reina es un mecanismo formal que existe para finalizar una temporada parlamentaria hasta inaugurar una nueva con el llamado 'Discurso de la Reina', fijado para el 14 de octubre. Esto supone el fin de todos los debates y votaciones de leyes que se estén llevando a cabo: el cese de toda actividad en la Cámara.
El Parlamento se suspende por un breve periodo de tiempo antes de que comience la nueva temporada. Suele suceder en otoño y le corresponde a la Reina hacerlo, a iniciativa de su primer ministro. Por eso Johnson ha tenido que acudir a ella para llevar a cabo su plan.
¿Es una situación normal?
Lo inusual de la suspensión que pretende el actual primer ministro británico es, sobre todo, la duración. Normalmente, desde 1980, el cierre del Parlamento antes del 'Discurso de la Reina' es de menos de una semana; Johnson ha ordenado el cierre de la Cámara durante más de un mes. Esto dejará un muy escaso margen de maniobra a la oposición para buscar recursos legislativos que eviten un brexit duro.
La temporada parlamentaria suele durar un año, sin embargo, ésta lleva abierta desde junio de 2017, más de dos años, y es la más larga de los últimos cuatro siglos.
¿Podría haberse negado la Reina?
Técnicamente, sí, por la llamada prerrogativa regia. La Reina de Inglaterra, junto con la Cámara de los Lores y la de los Comunes, forma parte de los tres pilares del Parlamento británico. Tiene la potestad de convocar, suspender y disolver las Cámaras. Sin embargo, sería muy difícil para ella hacerlo pues ejerce dicha prerrogativa bajo el consejo de sus ministros, en particular del primer ministro, que en este caso le aconsejaba la suspensión del Parlamento.
El líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn ha escrito a la Reina diciendo que "el peligro es que la prerrogativa regia se contrapone directamente a los deseos de una mayoría de la Cámara de los Comunes".
¿Qué argumenta Johnson?
Johnson ha sido acusado por la oposición de "golpe" contra el Parlamento, pero niega que con su decisión busque bloquear a los diputados que pretenden frustrar sus intentos de sacar adelante el brexit con o sin acuerdo el 31 de octubre. El primer ministro ha declarado que tendrán "tiempo de sobra" para debatir las posturas del brexit tras la cumbre de la UE del 17 de octubre.
Defiende que este movimiento permitirá a Downing Street "sacar adelante un ambicioso nuevo programa legislativo para ser aprobado por los miembros del Parlamento".
¿Qué puede hacer la oposición?
Esta decisión de Johnson ha llegado poco antes de que el líder de la oposición, Jeremy Corbyn, y otros miembros del Parlamento británico llegaran a un acuerdo para usar todos los medios legislativos a su alcance para frenar el arriesgado brexit sin acuerdo.
La situación en este momento hace que la posibilidad de una moción de censura sea mucho más real. Los diputados que apuestan por la opción de permanecer en la UE y los que priorizan un pacto para llevar a cabo el brexit, tendrán que valorar esta opción. Corbyn se había ofrecido a liderar un gobierno temporal que negocie una prórroga del artículo 50 de la UE y después convocar elecciones. Sin embargo, está posibilidad es difícil de asumir para la mayoría de conservadores.
El tory Dominic Grieve, que está en contra del brexit duro, ha dicho que planteará la posibilidad de la moción de censura a otros diputados de su misma opinión. "Si es imposible evitar la suspensión (del Parlamento), pienso que va a ser muy difícil para la gente como yo mantener la confianza en el Gobierno", ha dicho Grieve.
¿La Justicia puede actuar?
Sí. Otros políticos ya están dando pasos para llevar la decisión de Johnson ante la Justicia por considerarla ilegal. La diputada Joanna Cherry, del Partido Nacional Escocés, ha dicho que ha hablado con su equipo de abogados para acelerar el proceso en los tribunales escoceses.
El laborista escocés Ian Murray, un grupo de 70 diputados de todos los partidos y otros colegas que están detrás de esta acción legal dicen que considerarán buscar un veto temporal en el Tribunal Superior escocés para bloquear la suspensión del Parlamento.
El grupo de abogados liderado por Jolyon Maugham ha estado buscando un decreto de este tribunal para evitar que el primer ministro fuera a pedir a la Reina la suspensión del Parlamento hasta que agotaron todos los recursos.