El norirlandés Partido Democrático Unionista (DUP), socio del Gobierno británico, ha reiterado su oposición al acuerdo al que han llegado Londres y Bruselas sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).
Poco después de que el primer ministro británico, Boris Johnson, y la Comisión Europea (UE) confirmase la existencia de un pacto sobre el "brexit", fuentes del DUP indicaron a la cadena británica BBC y a la irlandesa RTE que su posición sigue siendo la misma.
"Nuestro comunicado anterior sigue en pie, en respuesta a la noticias de que se ha llegado a un acuerdo", dice la nota del DUP, cuyos diez diputados en Westminster permiten a Johnson gobernar en minoría y cuyos votos son claves para ratificar el nuevo acuerdo.
La líder del DUP, Arlene Foster, había emitido dicho comunicado manifestando sus reservas en relación con el acuerdo. La frontera entre las dos Irlandas es el asunto más complicado en el acuerdo sobre el 'brexit', ya que el objetivo es evitar establecer una infraestructura fronteriza para no perjudicar el proceso de paz de la provincia británica.
El primer ministro conservador, al no tener mayoría parlamentaria, necesita el respaldo del DUP si quiere conseguir que el acuerdo con Bruselas pueda ser aprobado por la Cámara de los Comunes del Parlamento de Westminster.
"Hemos participado en continuas conversaciones con el Gobierno. Como están las cosas, no podríamos aceptar lo que se está sugiriendo sobre aduana y otros asuntos sobre consentimiento, y hay una falta de claridad sobre el IVA", subraya la nota.
No obstante, el comunicado, firmado por Foster y el "número dos" de la formación, Nigel Dodds, puntualizan que "seguirán trabajando con el Gobierno para tratar de obtener un acuerdo sensato que funcione para Irlanda del Norte y pueda proteger la integridad económica y constitucional del Reino Unido".
En los últimos días, Johnson mantuvo intensas negociaciones con Foster para buscar la manera de superar los puntos más difíciles, si bien no se han dado a conocer los detalles de lo que se negocia.
Según lo que ha trascendido, en el acuerdo con Bruselas, se prevé que Irlanda del Norte siga alineada con ciertas normas del mercado único europeo pero forme parte del territorio aduanero del Reino Unido, con lo que los controles a los bienes se efectuarán en el punto de entrada a este territorio británico y no en la República de Irlanda.
Según explicó el negociador jefe de la UE para el brexit, Michel Barnier, en una rueda de prensa, las autoridades del Reino Unido se encargarán de aplicar las normas aduaneras de la Unión Europea en Irlanda del Norte.