La preocupación por la virulencia de la segunda ola de la Covid-19 en toda la UE se ha apoderado de la cumbre de líderes europeos que ha empezado este jueves en Bruselas. Una cumbre a la que no asiste el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, por estar en cuarentena tras el positivo de un contacto cercano. La propia presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, ha tenido que abandonar precipitadamente el encuentro al enterarse de que un miembro de su equipo está contagiado.
A su llegada al Consejo Europeo, Pedro Sánchez ha reclamado reforzar la coordinación entre los Estados miembros para combatir con más eficacia la pandemia. El presidente del Gobierno pretende "trasladar lo que venimos diciendo en España a nivel europeo: la necesidad de actuar de manera unida todos los países". Para Sánchez, la UE ya ha dado "algunos pasos muy importantes". En particular, la creación de un mapa armonizado de colores para designar los territorios y regiones con mayor riesgo de contagio o el reconocimiento mutuo de los tests.
"España querría seguir armonizando esa respuesta a nivel europeo, por ejemplo en el ámbito de las cuarentenas o por ejemplo también en el ámbito de la restricción de movilidad", ha insistido el presidente del Gobierno. Hasta ahora, los Gobiernos de la UE no han logrado ponerse de acuerdo sobre la duración de las cuarentenas (14 o 10 días) ni sobre las restricciones que hay que imponer a los viajeros que proceden de zonas de riesgo (cuarentena, tests o ninguna limitación).
Intereses compartidos con Londres
Los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 discutirán estas cuestiones en la segunda jornada de trabajo del Consejo Europeo el viernes por la mañana. El principal punto en la agenda es sin embargo el estado de las negociaciones del futuro acuerdo comercial entre la UE y Londres tras el brexit.
A juicio del presidente del Gobierno, el mensaje que debe enviar la UE tras esta cumbre es "una voluntad cierta de acuerdo" con Londres y el "espíritu de unidad" de los 27 y el respaldo al negociador, Michel Barnier. Pese a los escollos pendientes en materia de pesca, condiciones de competencia equitativa o sistema de resolución de litigios, Sánchez ve prioritario alcanzar un pacto con Boris Johnson.
"Para España este acuerdo es fundamental, no sólo por la relación histórica que tenemos con Reino Unido, sino también por los intereses comerciales y económicos que compartimos ambos países", ha señalado Sánchez en una declaración sin preguntas, ya que los periodistas no pueden acceder a la sede del Consejo Europeo por la Covid-19.
El presidente del Gobierno todavía espera "que durante estas semanas podamos lograr ese acuerdo que dé certidumbre, que dé confianza, en un momento tan difícil como el que está atravesando el mundo como consecuencia de nuevo de la emergencia en esta segunda ola de la pandemia".