España, a la cola de la UE en administración de dosis de refuerzo en pleno estallido de ómicron

"España es país líder en vacunación, no sólo en la Unión Europea, sino también en el terreno internacional", aseguró la ministra de Sanidad, Carolina Darias, en su última visita a la capital comunitaria. Lo cierto es que nuestro país ocupa la sexta posición en porcentaje de población con pauta inicial completa (74,7%), pero cae hasta el puesto 21º en inyección de terceras dosis (apenas el 11,8%). Un retraso que se produce en pleno estallido de la variante ómicron y pese a los reiterados avisos de Bruselas.

A la espera de que se completen los análisis científicos, la dosis de refuerzo es ahora mismo, según los dirigentes de la UE, el arma más eficaz contra ómicron. Tanto Pfizer-BioNTech como Moderna sostienen que la tercera dosis de sus respectivas vacunas multiplica el nivel de anticuerpos para neutralizar la nueva variante, una protección que ya no garantiza la pauta inicial.

Este diagnóstico lo comparte también la Agencia Europea del Medicamento (EMA), que todavía no ha decidido si será necesario adaptar la vacuna. "La prioridad ahora debe ser aumentar la cobertura vacunal y la cobertura de las dosis de refuerzo y aumentar el suministro", ha dicho este martes su directora, Emer Cooke.

Mayores de 40

Incluso antes de la aparición de ómicron, tanto la EMA como el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ya aconsejaron administrar una dosis de refuerzo a toda la población adulta, y sobre todo a los mayores de 40 años. Su argumento era que la inmunidad que ofrecen las vacunas se reduce considerablemente a partir de los seis meses, lo que exige reconstruir la protección para prevenir así hospitalizaciones y muertes.

La primera recomendación del ECDC se publicó el 24 de noviembre, es decir, hace casi un mes. Entre tanto, la EMA ha aprobado los boosters de Pfizer, Moderna y Janssen.

Una vez que se lanzó la alerta internacional sobre la peligrosidad de ómicron, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, instó a todos los Estados miembros a desplegar con carácter urgente una campaña masiva de inyección de dosis de refuerzo a toda la población adulta que ya tenga la pauta completa, y no únicamente a los mayores y grupos vulnerables. Lo hizo en un discurso ante la Eurocámara el 1 de diciembre. "La aparición de la variante ómicron agrega una urgencia adicional a la necesidad de poner en marcha campañas masivas para administrar dosis de refuerzo en todos los Estados miembros", sostenía ya entonces el Ejecutivo comunitario.

Alemania se adelantó a las recomendaciones de Bruselas y empezó a ofrecer terceras dosis a toda la población a principios de noviembre. Francia inició su campaña con los mayores de 40 años a finales del mes pasado. Italia también extendió la dosis de refuerzo a los mayores de 40 años desde el 25 de noviembre. Sin embargo, el Gobierno de Sánchez y las Comunidades Autónomas han arrastrado los pies.

En España, la tercera dosis sigue reservada hasta ahora para los mayores de 60 años. No fue hasta el 16 de diciembre cuando la Comisión de Salud Pública avaló la tercera inyección a las personas de 59 a 40 años, comenzando por las de mayor edad. Pero la mayoría de Comunidades Autónomas ni siquiera han fijado todavía fecha para el inicio de esta nueva campaña de vacunación masiva. Muchos vacunódromos que funcionaron durante la primera fase siguen cerrados.

Sólo registran peor cobertura que España en inyecciones de refuerzo Bulgaria (3,1%); Rumanía (4,7%); Letonia (7,5%); Croacia (7,7%); Holanda (8,5%), que acaba de decretar un confinamiento total y esgrime el despliegue tardío de la tercera dosis como uno de los motivos que han conducido a esta decisión; y Finlandia (10,9%).

Esta vez el problema no es la falta de vacunas. Bruselas acaba de acordar con Pfizer-BioNTech la entrega de 20 millones de dosis extra durante el primer trimestre de 2022. En total, este laboratorio enviará a la UE 215 millones de vacunas entre enero y marzo.

Pasaporte con caducidad

También Moderna ha acelerado el suministro de vacunas en diciembre y durante el primer trimestre de 2022, en particular a Alemania, que sí tenía problemas de escasez por mala planificación. Además, los Estados miembros han pedido alrededor de 27 millones de dosis de la nueva vacuna de Novavax para las próximas semanas tras la luz verde de la EMA.

En un nuevo intento de incentivar las dosis de refuerzo en toda la UE, Bruselas ha aprobado este martes, tras recibir el visto bueno de los Estados miembros, que el pasaporte Covid caduque a los 9 meses para las personas vacunadas. La validez del Certificado Covid Digital de la UE expirará al cabo de 270 días, salvo que su titular se inyecte una tercera dosis.

El objetivo de esta fecha tope -que no estaba prevista en la legislación vigente- es empujar a los ciudadanos a reclamar la dosis de refuerzo de la vacuna y evitar además que cada Estado miembro adopte medidas unilaterales y contradictorias. Para dar tiempo suficiente a la puesta en práctica de los cambios y a las campañas de terceras dosis en los Estados miembros, la reforma no entrará en vigor hasta el 1 de febrero de 2022.

"Lo que se necesita ahora es garantizar que las campañas de inyección de dosis de refuerzo avancen lo más rápido posible, que la mayor cantidad de ciudadanos estén protegidos con una dosis adicional y que nuestros certificados sigan siendo una herramienta clave para los viajes y la protección de la salud pública", insiste la comisaria de Sanidad, Stella Kyriakides.