Las Fuerzas Armadas rusas han vuelto a bombardear Kiev durante la noche de este sábado, después una jornada de combates por toda la ciudad, y han entrado en Járkov, la segunda ciudad más grande de Ucrania. Según fuentes estadounideneses, la mayoría de las más de 150.000 tropas desplegadas por Putin en torno a las fronteras de Ucrania, están ya luchando dentro del país. Sin embargo, los ucranianos resisten, por el momento, las embestidas del Ejército ruso.
Esta madrugada, en torno a la una aproximadamente, dos potentes explosiones han sacudido Kiev. Y el viceministro del Interior ucraniano ha advertido a la población de que es muy probable que se produzca un ataque aéreo inminente.
A pesar de ello, las fuerzas ucranianas afirman que mantienen sus posiciones y que los combates se libran en "los mismos lugares que hace tres días", según el consejero de la Presidencia de Ucrania Mijaíl Podoliak.
"Controlamos la situación en las regiones de Ucrania", señala. Y añade que "Rusia no puede hacerse con el control de ninguna ciudad ucraniana y se equivocaba si creía que a sus soldados los íbamos a recibir con flores".
"Ucrania resiste (...) creían que podrían apoderarse de Ucrania en cuatro, doce, como mucho dieciséis horas, estaban convencidos. Pero la realidad es otra. Los combates de posición se libran en los mismos lugares que hace tres días", recalcó, en un vídeo difundido por la agencia UNIAN.
Aunque Podoliak sí admitió que la situación se agrava en torno a Kiev, donde se encuentra la jefatura política del país. "Esto ocurre porque uno de los objetivos clave de Rusia es eliminar la jefatura política de Ucrania", subrayó.
El Kremlin acusa a Kiev de negarse a sentar a dialogar, por lo que Putin ordenó el sábado a las tropas avanzar en todos los frentes en una ofensiva total. El Ministerio de Defensa ruso explicó que la orden se había dado después de que Ucrania se hubiera negado a participar en un proceso de negociación para conseguir una resolución del conflicto.
En cambio, Ucrania ha matizado que no ha rechazado las negociaciones sino los requisitos planteados por las autoridades rusas y ha acusado al Kremlin de querer llevar esas negociaciones a un "callejón sin salida antes de que empiecen".
Mientras, las tropas rusas han entrado también en la ciudad ucraniana de Járkov, la segunda más grande del país, según el Servicio Estatal de Comunicaciones Especiales y Protección de la Información de Ucrania.
"Los vehículos enemigos se mueven por la ciudad. Debido a la situación operativa, se canceló el transporte en el distrito de Oleksiyivka", ha informado la entidad en su canal de Telegram, donde publicó un vídeo en el que se ven varios vehículos blindados en una zona urbana.
Zelenski sigue en Kiev
Pese a la amenaza rusa, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, sigue negándose a abandonar la capital y ha rechazado el ofrecimiento de Estados Unidos de facilitar su salida.
Además, horas antes del nuevo órdago de Putin aseguró que las tropas ucranianas habían logrado "descarrilar" el plan de ataque ruso para la capital, aunque también reconoció que la lucha continúa y "el destino de la nación se está decidiendo ahora mismo".
Aun así, Estados Unidos está preparado para llevar a cabo esta evacuación y evitar que sea capturado o asesinado si las tropas rusas consiguen avanzar, ha informado The Washington Post.
Zelenski ha mantenido durante las últimas 24 horas constantes contactos con varios mandatarios de otros países para aumentar la presión internacional contra Rusia mientras sus soldados resisten en las calles.
Esta resistencia ha llevado a que las fuerzas militares rusas estén cada vez más "frustradas". "Sabemos que no han logrado el progreso que querían, particularmente en la parte de norte de Ucrania. Lo que han visto es una resistencia determinada, y eso les ha ralentizado", según ha indicado un responsable del Departamento de Defensa a la cdena estadounidense CNN.
Expulsión de SWIFT
Mientras tanto, el Gobierno ucraniano ha visto hecha realidad una de las principales demandas que planteaba a sus aliados para presionar a la economía rusa: la exclusión de bancos rusos del sistema de pagos SWIFT.
Tanto Estados Unidos como la Unión Euroea han anunciado este sábado por la noche la intención de suspender a bancos rusos de este mecanismo. La restricción del acceso a SWIFT está considerada como "un arma nuclear financiera", como lo ha descrito el ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire. Esta medida permite bloquear el acceso de las instituciones financieras rusas a cualquier otra entidad financiera del mundo, lo que impide el pago de cualquier producto que venga de Rusia o se destine a Rusia.
Alemania ha sido uno de los países más reticentes con esta medida, pero el sábado dio finalmente su conformidad. Además, el país tambien ha aprobado por primera vez exportar sus armas nacionales a una zona de conflicto. De esta manera, Alemania enviará 1.000 armas antitanque y 500 misiles Stinger, algo que el propio Zelenski ha celebrado y agradecido en un mensaje en Twitter. "¡La coalición antiguerra en acción!", ha escrito el ucraniano.
Asimismo, los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea se reunirán este domingo por la tarde para "adoptar más medidas de apoyo de Ucrania, contra la agresión de Rusia", anunció el alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores, Josep Borrel. "Propondré un paquete de asistencia de emergencia para las fuerzas armadas ucranianas, en apoyo de su heróica lucha", anunció.
Borrel también se dirigió directamente a los ciudadanos rusos en un video publicado en Twitter en el que aseguró que los miembros de la UE "saben que mnillones de rusos no quieren la guerra".
Por su parte, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, anunció este sábado la aprobación de 350 millones de dólares adicionales en nueva asistencia militar a Ucrania para ayudar a hacer frente a la invasión por parte de Rusia.
Toque de queda en Kiev
Mientras tanto, los ciudadanos de Kiev afrontan la tercera noche de combates en la capital, donde su alcalde, Vitali Klitschko, ha anunciado un toque de queda para evitar la acción de grupos prorrusos de saboteadores y que crezca el número de víctimas civiles.
Por ahora, el Gobierno ucraniano ha reconocido la muerte de al menos 198 personas, incluidos tres niños. Además, ha resultado heridas 1.115 personas, según las cifras proporcionandas por el Ministerio de Sanidad del país. Ucrania también ha asegurado haber matado a 1.000 soldados rusos y capturado a otros 300.
Además de las víctimas, preocupa el acceso a alimentos y combustible. Los ucranianos se están enfrentando a grandes colas para conseguir efectivo en los cajeros y gasolina en las gasolineras, donde las ventas están limitadas a 20 litros, mientras que gran parte de las tiendas del centro de la capital estaban cerradas, indicó Reuters.
Mientras, Rusia ha asegurado que se ha hecho con el control Melitopol, una ciudad en el sureste del país con unos 150.000 habitantes. Sin embargo, Ucrania no ha confirmado esta información y Reino Unido ha planteado dudas sobre su veracidad.
En tanto, la localidad portuaria de Mariupol, que cuenta con un puerto considerado estratégico para la invasión rusa, continuó este sábado sometida a fuertes bombardeos, según declaraciones de su alcalde Vadim Boychenko, recogidas por al agencia.
Además, Zelenski ha recalcado también que los combates siguen en muchas partes del país, como en Sumy o Chernígov, y ha instado a todos los ucranianos a regresar a Ucrania y defender su país.