Diez personas han muerto por los efectos del temporal de lluvia que ha sacudido el centro de Italia la madrugada de este viernes. Cuatro se encuentran desaparecidas, entre ellas un niño de seis años que se encontraba en los brazos de su madre en un coche. Los bomberos pudieron rescatar a la madre, pero el menor fue arrastrado por la riada.
Todas las víctimas se cuentan en la región de Las Marcas, donde en poco más de dos horas ha caído la misma cantidad de agua que en un año entero, ha informado el responsable de Protección Civil, Fabrizio Curcio.
Curcio ha calificado lo ocurrido en la noche como un "desastre" que, lamenta, es solo un anticipo de lo que vendrá en otoño e invierno. "Hay que prepararse para estos fenómenos, que cada vez serán más comunes", ha advertido en una entrevista a la televisión Sky24.
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"No hubo tiempo"
El portavoz ha asegurado que "no se esperaban estos niveles", que "fue repentino" y en mayor proporción de lo previsto. En algunos lugares, ha apuntado esta vez el responsable de Protección Civil en la región, Stefano Aguzzi, "no hubo tiempo de intervenir" ni de avisar a la gente, que "pudo salir a la calle sin darse cuenta del peligro que corría", recoge el periódico La Repubblica.
Cuatro de los siete cadáveres se han hallado en un garaje en la localidad de Senigallia. Varios pueblos de la provincia de Ancona han sido gravemente dañados, con destrozos también en las regiones próximas de Toscana y Umbría. Cerca de 200 bomberos trabajan en busca de afectados que requieran de un rescate.
Filippo Saltamartini, responsable de Sanidad en Las Marcas, ha contado que "la gente se ha salvado trepando árboles y a los techos de los coches". En una entrevista a Radio Capital, ha hablado de agua a toda velocidad hacia el mar en Ancona, deslizamientos de tierra, carreteras cortadas y ambulancias sin acceso a los focos principales del temporal. El único alivio es que ha dejado de llover.
La tragedia ha tenido lugar en plena campaña para las elecciones generales, que se celebran el domingo 25 de septiembre. Todos los partidos han cancelado sus actos.