Bruselas

¿Es posible que el noveno paquete de sanciones de la Unión Europea contra Rusia por su guerra de agresión a Ucrania aprobado este viernes logre un resultado totalmente contrario al que supuestamente busca? ¿Que en lugar de endurecer el castigo contra los oligarcas que sostienen al régimen de Vladímir Putin las suavice? Eso es al menos lo que argumentan Polonia y Lituania, los países miembros más duros contra el Kremlin, que durante varios días han bloqueado la aprobación de estas medidas restrictivas.

La realidad es que el paquete en cuestión (que al final logró un apoyo unánime durante el Consejo Europeo de este jueves) relaja las sanciones contra los oligarcas rusos activos en el comercio de productos agrícolas. El objetivo declarado es facilitar el tránsito de fertilizantes a través de los grandes puertos europeos hacia países extracomunitarios.

Esta exención fue reclamada por España, Francia, Alemania, Holanda, Bélgica y Portugal con el argumento de dar "seguridad jurídica" a las empresas europeas y garantizar que las sanciones de la UE no obstaculicen el comercio mundial de alimentos y fertilizantes, ni contribuyan de ningún modo a provocar una hambruna.

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La Comisión de Ursula von der Leyen niega que se trate de una "exención" o de una "relajación" de las sanciones contra Rusia. Lo define como una "derogación muy limitada" que trata de dar respuesta a una serie de "problemas prácticos" ocurridos en los últimos meses.

"Hemos aprobado sanciones extremadamente ambiciosas y de amplio alcance contra Rusia, que han golpeado duramente a la economía rusa. Pero siempre hemos dicho dos cosas. La primera es que las sanciones deben hacer más daño a Rusia que a nosotros, porque debemos preservar nuestros propios intereses", ha explicado el portavoz de Von der Leyen, Eric Mamer.

"Además, debemos garantizar que nuestros socios en el resto del mundo puedan obtener lo que necesiten en el ámbito de la energía y los alimentos. Por eso, cada vez que sea necesario, aportaremos las aclaraciones necesarias con el fin de garantizar que así sea", alega el portavoz.

¿Cuál es entonces el problema que se pretende resolver con esta derogación para los oligarcas rusos? Frente a las acusaciones del Kremlin de que las sanciones de la UE son las responsables de obstaculizar la llegada de alimentos a los países en desarrollo, especialmente en África, Bruselas insiste en que las medidas restrictivas europeas no afectan en absoluto ni a los productos agrícolas ni a los fertilizantes de Rusia. Tan sólo hay un límite cuantitativo al potasio, que no se ha agotado.

Por el puerto de Rotterdam pasan cargamentos de fertilizantes rusos

La dificultad se plantea cuando algunos oligarcas rusos que están en la lista negra de la UE han tratado de utilizar puertos europeos (como el de Rotterdam) para exportar fertilizantes a países extracomunitarios. Al tener congeladas sus cuentas en Europa, estos oligarcas tienen dificultades para pagar a los operadores portuarios, que a su vez dudan de cómo actuar para que no se les acuse de ayudar a esquivar las sanciones.

El noveno paquete de sanciones contra Moscú incluye una derogación parcial que permitirá descongelar los activos de estos oligarcas para que puedan pagar por los servicios asociados a la exportación de fertilizantes, por ejemplo a una autoridad portuaria europea. Serán los Gobiernos del país en cuestión los responsables de determinar hasta qué punto permiten a los rusos sancionados acceder a sus cuentas. "Es una derogación muy específica, no una exención general, no salen de la lista negra", explican fuentes comunitarias.

Oportunidad perdida

El paquete de sanciones no nombra a los oligarcas que se beneficiarán de esta "derogación". Habla en general de personas con un papel importante en el negocio de productos agrícolas y fertilizantes. Pero el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, ha señalado en concreto a Viatcheslav Kantor, gran accionista del Grupo Acron, cotizado en bolsa y uno de los mayores fabricantes de fertilizantes en Rusia.

"Está estrechamente vinculado al presidente Vladímir Putin, una relación que le ha ayudado a conservar su considerable fortuna. Ha puesto abiertamente de manifiesto en varias ocasiones su apoyo y amistad hacia el presidente Putin y goza de buenas relaciones con el Kremlin. Es también uno de los destacados empresarios rusos activos en sectores económicos que proporcionan una fuente sustancial de ingresos al Gobierno de la Federación de Rusia", explica el Diario Oficial de la UE para justificar su inclusión en la lista negra de sanciones.

La oposición de Polonia y Lituania a relajar las restricciones contra los oligarcas rusos mantuvo en vilo la aprobación del noveno paquete de sanciones a Rusia. Durante varias horas, pareció que la cumbre de líderes europeos iba a acabar en fracaso. Pero al final los dos países cedieron tras obtener garantías de que ellos no estarán obligados a aplicar estas derogaciones en sus propios puertos.

"El noveno paquete de sanciones ha sido una oportunidad perdida. Es triste que tuviéramos que pasar tanto tiempo discutiendo excepciones, no sanciones más fuertes", ha escrito en Twitter el ministro de Exteriores de Lituania, Gabrielus Landsbergis. "La seguridad alimentaria es importante, pero no debe ser utilizada como excusa para relajar las sanciones contra algunos oligarcas rusos porque cada día hay ciudadanos ucranianos que mueren bajo las bombas rusas", sostiene el presidente del pais, Gitanas Nauseda.