El Ministerio de Defensa de Reino Unido ha asegurado este sábado que el estado ruso enfrenta su mayor desafío de seguridad reciente, después de que el Grupo Wagner se haya amotinado y haya tomado Rostov. Wagner acusa a Rusia de haber atacado a sus mercenarios.
"En las próximas horas, la lealtad de las fuerzas de seguridad de Rusia, y especialmente de la Guardia Nacional Rusa, será clave para el desarrollo de esta crisis. Esto representa el desafío más importante para el Estado ruso en los últimos tiempos", dijo el Ministerio de Defensa británico en un comunicado.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores británico advirtió del riesgo de disturbios en toda Rusia, reincidiendo en su recomendación a los ciudadanos de que no viajen al país.
"Hay informes de tensiones militares en la región de Rostov y el riesgo de más disturbios en todo el país. Además, hay una falta de opciones de vuelo disponibles para regresar al Reino Unido", dijo el Ministerio.
Varios países de Occidente se han pronunciado en relación a la situación que está viviendo Rusia. Estonia, por ejemplo, instó a su población a no viajar a Rusia, mientras tanto ese país como las otras dos repúblicas bálticas, Lituania y Letonia, refuerzan sus fronteras orientales.
El gobierno alemán también "desaconseja" viajar a Rusia y apremia a quienes se encuentren en el país a "evitar" el centro de Moscú, así como cualquier instalación militar y especialmente la ciudad de Rostov.
Por su parte, tanto la Unión Europea como la OTAN han anunciado que están "monitorizando" la situación. Bruselas, además, entiende que se trata de un proceso "interno".
Además, El Ministerio neerlandés de Defensa aseguró este sábado que "la discordia" entre el grupo de mercenarios Wagner y el Gobierno ruso es "por supuesto, una mala noticia" para el presidente Vladimir Putin, durante una guerra contra Ucrania que “ya de todos modos no va como él quiere”.