La ciudad de Birmingham es una de las más importantes y conocidas del Reino Unido. De hecho, se la considera la segunda urbe más representativa del país por detrás de Londres. Sin embargo, en estos momentos no es noticia por su relevancia en el estado, si no por una gran polémica que rodea a su Ayuntamiento.
El propio Ayuntamiento de Birmingham ha confesado que se encuentra en una situación de quiebra económica. Además, desde el consistorio de la ciudad alegan que el preocupante estado de sus arcas se debe a la imposibilidad que le ha supuesto en los últimos tiempos asumir los gastos derivados de reclamaciones sobre igualdad salarial.
Una postura pública que ha generado un gran revuelo en Europa y por la que ha recibido multitud de críticas, ya que la equiparación salarial debería ser una cuestión básica en el funcionamiento de cualquier organismo, especialmente si se trata de un ente público. El Ayuntamiento de la ciudad asegura que de no haber tenido que pagar una enorme cantidad de dinero en demandas por discriminación salarial, podrían haber revertido su crítica situación.
Birmingham echa la culpa de sus crisis a la equiparación salarial
El Ayuntamiento de Birmingham está considerado como el mayor de toda Europa. Está compuesto por 101 concejales distribuidos en 69 distritos diferentes. Además, es uno de los más importantes de todo el Reino Unido al ser el más representativo del país junto al de Londres. Sin embargo, en estos momentos se encuentra "en quiebra".
El motivo sería la imposibilidad de asumir los gastos derivados de reclamaciones en materia de igualdad salarial. A través de sus medios oficiales, el consistorio ha confirmado que ahora mismo no tiene "recursos suficientes" para confrontar esos gastos. Por si fuera poco, asegura que no tiene "ningún otro medio para hacer frente a esa responsabilidad".
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El Ayuntamiento, que se encuentra en manos del Partido Laboralista, ha afirmado que tiene un déficit presupuestario de 87 millones de libras, es decir, más de 100 millones de euros. Además, las autoridades de la ciudad aseguran que tienen unos costes pendientes por esas reclamaciones de igualdad salarial de casi 900 millones de euros.
Números que convierten su situación en insostenible. En sus quejas públicas, el Ayuntamiento de Birmingham, que atiende de manera directa a 1,2 millones de habitantes, afirma haber pagado ya 1.100 millones de libras, es decir, casi 1.300 millones de euros, en demandas que ha recibido por casos de discriminación salarial.
Esta caótica situación arrancó en el año 2012 cuando el Tribunal Supremo británico falló a favor de decenas de empleadas que, como asistentes de aula o limpiadoras, habían cobrado sueldos notablemente menores que sus compañeros de trabajo. Unos puestos en los que además el predominio masculino era total.
A pesar de que el momento es crítico para la ciudad, el Birmingham City Council, nombre oficial de la institución, ha informado de que como medida de emergencia, y siempre siguiendo el proceso recogido en la ley financiera para gobiernos municipales, "todos los nuevos gastos, con excepción de la protección de las personas más vulnerables y los servicios obligatorios, se detendrán de inmediato".
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La preocupación en estos momentos es muy grande en la ciudad y particularmente en el consistorio. Sin embargo, los 101 concejales han mostrado su voluntad y su compromiso para encontrar la mejor solución al complicado momento que atraviesa el organismo. También han dejado claro que próximamente informarán con mayor detalle de cómo avanza la situación y lamentan la polémica que se ha generado alrededor de estas quejas tan comentadas.